La Valleta de Agres, un año más, fue el escenario en la mañana de ayer del «Concurs de Gossos de Ramat» en el que once perros, atendiendo las indicaciones de sus amos, guiaron a un rebaño de ovejas por los pasadizos y recintos cerrados habilitados en el circuito. Más de 800 personas pudieron disfrutar de este certamen que no solo muestra la destreza de los canes y sus pastores para dirigir al ganado ovino, sino también persigue, entre otras cosas, «dar a conocer la actividad ganadera, divulgar los trabajos de los antepasados ligados con la ganadería o dar a conocer el patrimonio genético autóctono y la biodiversidad tradicional como las razas de los perros o de las ovejas», según explican desde el Col-lectiu Esquella, organizador del concurso.

A la hora marcada daba comienzo el circuito de pruebas correspondientes a la primera fase. En esta etapa, los profesionales o aficionados debían dar órdenes a sus perros para superar tres pruebas. Primero, el pastor tenía que guiar al perro para que pasara por una pista delimitada y detenerlo una vez. Después el perro iba en busca del rebaño para conducirlo hasta un círculo de unos doce metros de diámetro en el que los animales debían permanecer unos segundos.

Por último, el can tenía que conseguir que las protagonistas cruzasen por una puerta seleccionada por el jurado. En este caso si realizaban el recorrido entre la puerta de la parte derecha y el corral anotaban cinco puntos extra en sus marcadores. El viento entorpeció en algunos casos la comunicación entre los perros y los pastores, pues no escuchaban claramente lo que les querían transmitir.

Diversidad de procedencias

De los once perros participantes llegados del País Vasco, Cataluña, Navarra y la Comunidad Valenciana únicamente cinco pasaron a la fase final. En ella tuvieron que ir en busca de las ovejas e introducirlas en un corral para posteriormente sacarlas del mismo recinto.

El ganador del concurso fue Juli Bayot con su can «Gandalf», el can demostró sus dotes y realizó el circuito de forma perfecta y en el mejor tiempo registrado frente a sus oponentes.

A pesar del frío registrado durante la jornada, más de 800 personas de las comarcas de l´Alcoià y el Comtat asistieron a esta cita que además de mostrar esta práctica quiere respaldar la tradición de la actividad ganadera.

Además de esta tradicional actividad, el Col-lectiu llevó a cabo durante el fin de semana diversas actividades entre las que destacaron algunas charlas para abordar la problemática de algunos animales en peligro de extinción.

Los pastores participantes y el público asistente se mostraba muy satisfecho con la actividad y manifestaba la importancia que el pastoreo tiene para la conservación del territorio. Entre algunos de los fenómenos que se destacaron por parte de los pastores es la relevancia que los rebaños tienen en la prevención de incendios, una actividad que ahora se está llevando a cabo en muchos municipios. Aunque también destacaban que a pesar de ir en aumento se debe potenciar para que los rebaños en lugar de reducirse aumenten y esta actividad no se pierda.