La última versión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Alcoy rebaja en 10.000 habitantes la previsión de crecimiento de la ciudad. El descenso del techo máximo de población queda situado en 69.843 vecinos y se sustenta en un recorte de las zonas de expansión urbana en Batoy, Llometes y el Serpis. El gobierno municipal socialista ha sacado adelante el documento sin votos en contra, aunque con fuertes críticas por parte del PP.
El pleno del Ayuntamiento sometió ayer a aprobación la última versión del PGOU resultante del período de exposición pública, durante el cual se han presentado 56 alegaciones, de las que más del 50% han sido estimadas de forma total o parcial.
Este hecho ha provocado cambios sustanciales en el documento, destacando sobre todo la sensible reducción experimentada en las previsiones de crecimiento de la ciudad. El techo máximo de población para un horizonte de 20-25 años ha quedado situado ahora en 69.843 habitantes, frente a los 79.843 que recogía la anterior propuesta. Esto supondrá una reducción de las superficies de las zonas de uso residencial, concretamente en Batoy, junto a la vía verde, y en Les Llometes. La zona prevista en el Serpis, de pequeñas dimensiones, directamente desaparece. También se reduce la edificabilidad total de uso residencial permitido en los sectores de nuevo desarrollo.
El documento fue aprobado anoche por el pleno con los votos favorables del PSOE, Ciudadanos y Compromís, y la abstención tanto de Guanyar como del PP.
El concejal de Territorio, Manolo Gomicia, defendió esta última versión del plan, manifestando que los cambios introducidos «vienen a reforzar el modelo de ciudad compacta por el que venimos apostando desde el principio, que es lo que demandan además las instituciones europeas».
Guanyar, a través de Estefania Blanes, agradeció la voluntad del equipo de gobierno y de los técnicos a la hora de atender las alegaciones, indicando que la previsión de habitantes de este último documento «es mucho más real que el anterior», en base a que en la actualidad la ciudad tiene 58.977 vecinos.
José Miguel Antolí, de Ciudadanos, enfatizó que el plan propuesto «no es el nuestro, porque la ciudad compacta constriñe mucho el crecimiento. Aún así, muchas de nuestras propuestas han sido aceptadas y no vamos a poner palos en las ruedas».
Màrius Ivorra, de Compromís, señaló compartir el modelo de ciudad que se contempla, y aseguró el voto positivo de su grupo tras comprometerse los socialistas a facilitar una ampliación del catálogo de edificios a proteger.
El más crítico fue el portavoz del PP, Rafa Miró, quien subrayó que «no queremos ser cómplices del fin de Alcoy como ciudad industrial», en referencia a que sólo se contemplan 400.000 metros cuadrados de suelo en este sentido.
El alcalde, Antonio Francés, cerró el debate destacando que no ha habido votos en contra «y se ha logrado el equilibrio entre el desarrollo exacerbado que pregona el PP y el exceso de celo en materia de protección de Guanyar».
El documento aún tendrá que ser sometido a una nueva exposición pública antes de su remisión al Consell para su aprobación definitiva. El plan se está tramitando desde 2013 y se espera que la parte estructural quede aprobada antes de final de año.
