Un ganadero se ha instalado con sus 450 ovejas en terrenos del polígono industrial de Tibi para pasturar. El Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (IVACE), como propietario del suelo, así como la Policía Local, han iniciado acciones legales contra el pastor al carecer de permiso y estar utilizando además agua de la red de la superficie empresarial para dar de beber a los animales. La actividad la está desarrollando en la zona prevista para la futura ampliación del polígono.
El polígono industrial de Tibi, municipio de la Foia de Castalla, ha permanecido durante muchos años inactivo, pero una vez que se ha puesto en marcha, no está dando servicio tan solo a las empresas que se han instalado allí, sino también a un pastor que ha hecho lo propio con sus 450 ovejas.
El ganadero en cuestión, vecino de Castalla, ha habilitado con la ayuda de su padre un cercado provisional junto a los restos de una casa en ruinas situada en el suelo adquirido por el IVACE para acometer la ampliación del polígono. Allí ha introducido a sus 450 ovejas, a las que todos los días saca a pastar por estos mismos terrenos. También ha instalado una caravana para pernoctar allí y vigilar a los animales por las noches.
La estampa es del todo peculiar, con el ganado recorriendo la zona y al fondo las modernas naves industriales que se han edificado en los últimos meses.
La actividad del pastor, sin embargo, podría tener consecuencias legales. Y es que tanto el IVACE como la Policía Local han iniciado acciones contra el ganadero, habida cuenta de que carece de permisos para pasturar en estos terrenos.
De entrada, técnicos del organismo dependiente de la Conselleria de Economía ya han estado en la zona tomando fotografías y anunciando la presentación de una denuncia por una presunta usurpación del suelo.
También la Policía Local de Tibi se ha personado en la parcela para la apertura de un expediente no solo por la actividad ganadera en este enclave, sino también porque se ha estado utilizando agua potable de la red del polígono para dar de beber a los corderos, conectándose con una manguera a las bocas de riego.
Otra de las cuestiones que han sido tomadas en consideración por los agentes es la presencia de cinco perros sueltos, que podrían suponer un peligro para las personas que transiten por allí.
La presencia del pastor, con todo, tiene pinta de ser efímera, toda vez que durante el tiempo que ha estado el ganado en la zona ha terminado prácticamente por completo con la hierba de la que se alimentan las ovejas. De ahí que tenga previsto coger en breve los animales y trasladarlos a un lugar en el que haya pastos frescos.
