El Gobierno del Estado ha solicitado a la Unión Europea (UE) la puesta en marcha del plan de repoblación dirigido a los campos afectados por la Xylella en la provincia de Alicante. El objetivo que se persigue es replantar los terrenos con almendros resistentes a la bacteria u otro tipo de cultivos para ofrecer nuevas oportunidades a los agricultores. La campaña de erradicación que está llevando a cabo la Conselleria de Agricultura afecta ya a unos 72.000 árboles que han sido arrancados o bien se encuentran en proceso.
La Xyllella Fastidiosa se extiende por el norte de la provincia de Alicante, siendo en la actualidad más de 60 los municipios de la Marina Baixa, Marina Alta, El Comtat y l'Alcoià que se encuentran afectados. El plan de erradicación que está acometiendo la Conselleria de Agricultura, siguiendo instrucciones de la Unión Europea, afecta a unos 72.000 árboles que ya han sido arrancados o se encuentran en proceso, según los datos que maneja la organización agraria Asaja. Esta cifra supone, en la práctica, que la cosecha de almendra en la provincia se va a ver reducida en más de 350 toneladas, lo que supone alrededor del 16% de la producción.
El Consell insiste al indicar que las autoridades comunitarias se muestran inflexibles con las medidas de erradicación
El plan de erradicación, con todo, está teniendo consecuencias nefastas para las áreas rurales, toda vez que las zonas más afectadas por la bacteria están situadas en las comarcas de montaña. Es justo aquí donde se ubican los municipios más pequeños de la provincia, cuyas economías se están viendo seriamente dañadas con la destrucción de los almendros.
Un ejemplo de ello son las poblaciones de Fageca y Famorca, que tal y como informaba ayer este diario, están sufriendo en estos momentos el arranque del arbolado ante la desesperación de sus vecinos, la mayor parte de los cuáles tienen su medio de vida en la agricultura. Se quejan de que las medidas que se están llevando a cabo están contribuyendo a la despoblación, y coinciden a la hora de reclamar que se pase del plan de erradicación a uno de contención, que no comporte la eliminación de árboles sanos. También denuncian que las indemnizaciones que se perciben, de alrededor de 20 euros por almendro, son totalmente irrisorias y no reparan ni de lejos el daño que se está produciendo.
El objetivo que persigue la Generalitat con el plan de repoblación que ha sido solicitado a la UE es ayudar a los afectados y evitar que los campos queden desiertos
En este contexto, la semana pasada se producía la primera comisión bilateral entre el Estado y la Generalitat, y uno de los asuntos que estuvieron encima de la mesa fue precisamente la problemática generada con la Xylella. Según la información facilitada, en la reunión se dio cuenta de las conversaciones que se están manteniendo con la Unión Europea para ofrecer algún tipo de compensación a los agricultores.
Las fuentes consultadas por parte de la Generalitat insisten a la hora de señalar que la Unión Europea es inflexible y obliga a aplicar el plan de erradicación que se está llevando a cabo en estos momentos, según el cual no sólo se tienen que arrancar los almendros afectados, sino los situados también en un radio de cien metros alrededor.
Las mismas fuentes destacan que la normativa impide al gobierno autonómico completar las ayudas que llegan procedentes de la propia UE, lo que sería contrario a la legislación.
72.000 almendros están siendo arrancados
Es por ello por lo que se está trabajando en la puesta en marcha de un plan piloto que permita ayudar de otras maneras a los agricultores que se están viendo afectados, y ante el cual las autoridades comunitarias sí que se están mostrando receptivas.
En este sentido, en el transcurso de la reunión bilateral se dio cuenta de que el Gobierno ya ha solicitado a la UE la puesta en marcha del programa de repoblación que ya fue tratado en Bruselas meses atrás entre el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y el comisario de Agricultura, Phil Hogan.
Lo que se pretende es el desarrollo de un plan por medio del cual se proceda a repoblar los campos afectados por la Xylella con almendros blindados contra esta bacteria, o bien con otros cultivos que puedan resultar adecuados y rentables a nivel productivo.
Desde el Consell se considera que estas medidas contribuirían a ofrecer una salida de futuro a los agricultores, al tiempo que se se evita que los terrenos queden desertificados.
Esta iniciativa será posible a través de la modificación del plan de desarrollo rural por parte de Bruselas, sobre la base de que permitirá destinar los fondos iniciales a paliar los efectos de la Xylella.
Reunión
En cualquier caso, los afectados por la plaga siguen reclamando que se pase del plan de erradicación al de contención, como ha sucedido en las Islas Baleares, para lo cual pretenden continuar movilizándose. El lunes próximo, sin ir más lejos, está prevista una reunión en Castell de Guadalest para abordar la situación actual y decidir cual va a ser la hoja de ruta a partir de este momento para intentar evitar que los árboles sanos continúen siendo arrancados.
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