El 20 de agosto de 1987 inició su trayectoria profesional como bombero, y 20 años después, en 2007, pasó a ser el suboficial del parque comarcal La Montaña, situado en el término municipal de Cocentaina. Con una dilatada experiencia, ahora el Consorcio Provincial de Bomberos ha creado la figura de coordinador de incendios forestales y ha confiado en él para desempeñar dicha labor.
P ¿Con qué finalidad crea el Consorcio este cargo?
R Aunque hay una sistemática de trabajo unificada y generalizada en la provincia, la idea es ir un paso más allá, e intentar conseguir una mayor coordinación para ser más eficaces.
P Los últimos grandes incendios en la provincia fueron los de Serelles y La Torre en el verano de 2012, ¿cada vez hay menos?
R Cada vez hay menos, por suerte, pero cuando hay son mucho más peligrosos. Todos sabemos cómo están los montes. Hay un abandono total de la agricultura en las zonas de montañas, y lo que antes eran zonas de cultivo han ido pasando, en muchos casos, a forestales, así como tampoco hay un aprovechamiento de la madera como antiguamente. Todo eso hace que haya una gran acumulación de combustible en el monte. Pero hay otro factor, y es que cada vez nos trasladamos más a vivir al entorno natural y eso nos genera otros riesgos.
P ¿A qué riesgos se refiere?
R A los incendios de interface, que afectan a monte y viviendas. La ley nos obliga a proteger a las personas, bienes y medio ambiente, en ese orden. Entonces cuando tienes un incendio de estas características, los recursos que en un principio dedicarías a la extinción los desvías a la protección de esas zonas, y luego ya se actúa sobre el incendio.
P ¿Qué tareas desempeñará tras asumir el nuevo cargo?
R Yo tengo ahora una primera fase para ir viendo todos los parques de la provincia, los vehículos forestales o rurales, el material, en qué estado está y qué necesidades hay. La idea es hacer un pequeño inventario, para después empezar con formación para mandos, e ir unificando todavía más las formas de actuación. Después también quiero fomentar poco a poco la relación con las unidades de bomberos forestales.
P En los últimos tiempos ha habido críticas por parte de los bomberos forestales....
R Quiero limpiar todo ese tema. Hay gente que yo creo que no acaba de entender o situarse en el contexto. Somos compañeros, hemos estado toda la vida juntos y a raíz de cambiarles el nombre -en referencia a los bomberos forestales- ha habido gente que o no ha entendido bien la idea o no se la han explicado bien. Al final nos la estamos jugando hombro con hombro, la relación siempre ha sido magnífica.
P ¿Cómo es el trabajo en un puesto de mando?
R Es un trabajo a nivel de cabeza tremendo. Cuando era bombero y había un incendio grande trabajaba muchísimo, llegaba a casa, me duchaba y dormía como un niño, ahora el cerebro sigue. La gestión de un puesto de mando es más compleja de los que parece, están las emisoras, los teléfonos, la gente pidiéndote cosas..., tienes que pensar en el avituallamiento, en como escalonar los medios aéreos, en los tiempos de descanso y actuación. Todos esos datos hay que ir teniéndolos en cuenta.
