El gobierno del PSOE en Alcoy, en situación de minoría, logrará sacar adelante los cuartos presupuestos de la legislatura después de un largo e intenso proceso de negociaciones con los grupos de la oposición. Pese a que en la comisión informativa de ayer se abstuvieron, PP y Compromís han avanzado su predisposición a votar a favor en el pleno del jueves. Ciudadanos se mantendrá en la abstención, y solo Guanyar se posicionará en contra, tal y como ya lo había anunciado.
El Ayuntamiento acogió en la tarde de ayer la reunión de la comisión informativa previa al pleno extraordinario del próximo jueves, en el que tendrá lugar el debate de los presupuestos. Solo el PSOE votó a favor de las cuentas, mientras que Guanyar lo hizo en contra y PP, Compromís y Ciudadanos se abstenían.
El posicionamiento de estos tres últimos grupos, sin embargo, fue meramente instrumental, toda vez que habrá cambios de posicionamiento en la sesión del jueves y el gobierno sacará adelante su propuesta, todo parece indicar, además, que con más holgura que el año pasado, cuando consiguió el apoyo de Compromís y la abstención de Ciudadanos.
Los nacionalistas ya habían anunciado semanas atrás su predisposición a apoyar las cuentas, tras aceptar el PSOE los proyectos que consideraban irrenunciables. Se trata, en concreto, del desarrollo del parque tecnológico de la manzana de Rodes, un centro juvenil y cultural abierto y el evento ferial con el que se pretende apoyar al comercio local. El portavoz, Màrius Ivorra, ratificaba ayer a este diario que, de no surgir ningún contratiempo, el voto efectivamente será afirmativo.
Más llama la atención, por novedosa, la predisposición del PP a apoyar también el presupuesto presentado por los socialistas. Ha sido tras un proceso de negociaciones en el que los populares, según han declarado, han logrado arrancarle al ejecutivo 411.000 euros para proyectos económicos y sociales. Destacan iniciativas como los anteproyectos de la futura ronda industrial sur, que unirá Batoy con el polideportivo, y el nuevo acceso desde el Viaducto. También un estudio sobre demanda de suelo industrial y la puesta en marcha de una oficina de captación de inversiones. De igual forma, se ha conseguido un refuerzo de la partida destinada a mantenimiento de la ciudad. También el compromiso de no gastar más del 50% en determinadas partidas antes de las elecciones, en previsión de que pueda haber un cambio de gobierno.
El portavoz del PP, Rafa Miró, destacaba tras la comisión informativa que el voto será favorable «si tal y como se ha comprometido, el ejecutivo municipal nos entrega un documento firmado con las propuestas aceptadas y el calendario de ejecución de las mismas, para que después no quede todo en papel mojado».
Ciudadanos, por su parte, se mantendrá en la abstención «por responsabilidad», según ha señalado José Miguel Antolí. El concejal justificaba la postura de su grupo en «la enorme duda que nos plantea la falta de concordancia entre los objetivos planteados y la parte económica-financiera para ejecutarlos». Con todo, también subrayaba que «a pesar de nuestras reticencias, no vamos a hacer una política de derribo que pueda paralizar la ciudad dejándola sin presupuesto anual, porque eso no sería bueno».
Único voto negativo
Guanyar, como ya había anunciado, será el único grupo que vote en contra, cosa que ratificó ayer. Su portavoz, Estefania Blanes, insistía a la hora de lamentar que «el PSOE se dedique a mercadear con quien haga falta en lugar de construir un proyecto de ciudad moderno y con futuro en los presupuestos».
La concejal socialista de Hacienda, Vanessa Moltó, se mostraba todavía prudente en la jornada de ayer a la espera de lo que suceda en el pleno, aunque remarcaba el esfuerzo de su grupo a la hora de negociar «y aceptar las propuestas que entendemos que son buenas para la ciudad, sin desvirtuar nuestro proyecto».
Los presupuestos que se llevan a aprobación el jueves ascienden a 64 millones de euros, destacando por encima de todo la partida dedicada a inversiones, que con 12,5 millones supone un incremento del 68%.
