Màrius Ivorra tomó el relevo de David Abad como portavoz de Compromís en Alcoy justo en el ecuador de la actual legislatura. Desde que entró a formar parte de la corporación municipal ha mostrado un talante dialogante con el equipo de gobierno, sobre todo a la hora de negociar los presupuestos, siempre con el objetivo de «influir» en determitados temas. Eso no ha sido impedimento para protagonizar intensos debates durante las sesiones plenarias y lanzar críticas hacia un ejecutivo que, según apunta, «se ha dedicado a sobrevivir».
P Fue el segundo candidato, tras el alcalde Antonio Francés, que se hizo público en Alcoy, ¿cómo ve la campaña?
R Nosotros hicimos la asamblea en octubre y fui el único que presenté candidatura. Todos entendieron que yo debía continuar la tarea que se está haciendo. En cuanto a la campaña, a nivel de Alcoy estamos contentos, tenemos buenas perspectivas y desde València los estudios internos y las encuestas nos marcan que vamos a crecer, y trabajamos para que así sea.
P ¿Qué línea de trabajo están siguiendo?
R Nosotros, desde que estoy yo como concejal, estamos intentando hacer una oposición mucho más dinámica y activa, de propuestas, y pienso que hasta la fecha ha dado buen resultado. Tenemos un talante dialogante, sabemos llegar a acuerdos y nuestra idea a partir de ahora es gobernar.
P En cuanto a la propuesta de Guanyar de sumar fuerzas...
R Desde lo que ha pasado en Andalucía pensamos que la derecha ha crecido porque ha estado representada en diferentes sensibilidades. Nosotros ya somos una coalición -Bloc, Iniciativa y Verds- y aunque estamos abiertos a propuestas de otros partidos, pensamos que sumar bajo una única marca puede no funcionar; en política uno más uno no siempre suman dos. Es interesante e importante poder abarcar todas las sensibilidades y después de las elecciones, a posteriori, sí que estamos dispuestos a sentarnos y negociar para llegar a acuerdos poniendo encima de la mesa los proyectos que realmente son necesarios para la ciudad.
P ¿Qué cambios necesita la ciudad?
R Lo primero que hay que cambiar es la dinámica de derrotismo, dejar de mirar el pasado y mirar el futuro. No puede ser que estemos siempre fustigándonos con el tema de que Alcoy antes tenía grandes empresas. Eso ha pasado, como ha pasado en muchos sitios del mundo. Hay que romper ese lastre, recordarlo con orgullo y planificar el futuro, mirando lo que están haciendo los países punteros e importarlo.
P ¿Cómo ve la gestión del gobierno municipal?
R El gobierno socialista nos ha dado siempre la sensación de que está intentando sobrevivir, manteniendo un perfil bajo e intentando no hacer muchas cosas para no tener problemas.
P Pese a las críticas al ejecutivo, el año pasado llegaron a un acuerdo para apoyar los presupuestos y en esta ocasión están muy cerca...
R Nuestra intención es gobernar para incluir nuestros propios proyectos de futuro, pero basándonos en que no son nuestros presupuestos y no es tan fácil modificarlos, estamos intentando influir en ellos. Si nos aceptan las cuestiones que proponemos estaremos contentos porque seguiremos ejerciendo una oposición responsable.
P Otras formaciones acusan al gobierno local de no ejecutar las propuestas de la oposición...
R Cuando pactamos en 2018 nos involucramos en la gestión de nuestras propuestas como si fuesemos del gobierno. Hemos trabajado mucho y si no se han ejecutado no es por incumplimiento. Todo lo que se ha negociado se ha llevado a término y lo que no, es porque no se ha podido.
P ¿Les preocupa que el caso de Andalucía pueda trasladarse a Alcoy?
R Si aparece Vox en Alcoy es porque ya había una semilla de la extrema derecha aquí. Pensamos que es un retroceso en el avance socio-cultural y creemos que están utilizando el miedo para generar situaciones que no nos gustan y que no queremos volver a repetir.
