Un nuevo servicio municipal en Alcoy ha logrado insertar en el mercado laboral a 26 personas en riesgo de exclusión social en menos de seis meses. El Ayuntamiento puso en marcha este programa de orientación socio-laboral el pasado mes de agosto gracias a una subvención de 147.000 euros de la Conselleria de Políticas Inclusivas, con el objetivo de facilitar la búsqueda de empleo a personas derivadas del departamento de Servicios Sociales.

La Generalitat es la que gestiona este tipo de ayudas procedentes de fondos europeos y que tienen carácter anual. El consistorio alcoyano recibió la primera aportación el pasado mes de agosto, poniendo en marcha el nuevo servicio de orientación socio-laboral, que cuenta con tres técnicos.

Desde dicho mes hasta diciembre, las dos orientadoras y la trabajadora social han atendido a 126 personas con riesgo de exclusión social y han logrado la inserción en el mercado laboral del 20%, lo que supone un total de 26 usuarios. Todos ellos son derivados por el departamento de Servicios Sociales.

El Ayuntamiento ha querido dar continuidad al programa, por lo que ha alquilado un local en la calle Sant Domènech que cuenta con dos alturas, una destinada a oficinas, y otra en la que se realizan las intervenciones grupales y dos despachos para reuniones individuales.

El alcalde, Antonio Francés, y la concejal de Bienestar Social, Aroa Mira, mostraron ayer las nuevas dependencias con las que el equipo de gobierno quiere demostrar que «la inclusión socio-laboral es una de nuestras prioridades», así como que en este sentido han ido dirigidas «muchas de las acciones de esta legislatura».

Una de las técnicos, Almudena Lorente, explicaba que el programa incluye diferentes itinerarios en los que se trabaja el desarrollo social, la motivación, la autoestima e, incluso, «se les ofrece nociones de informática para que puedan buscar empleo».

El objetivo es llegar a 250 usuarios al año, de cualquier edad y siempre derivados por Servicios Sociales. Además, esta nueva área municipal está coordinada con Cruz Roja para el tema formativo y directamente conectada con el servicio municipal de empleo del Àgora.

Dado el buen resultado, el Ayuntamiento ha decidido mantener el programa hasta que llegue la resolución definitiva de la subvención para 2019.