El gobierno de lo absurdo toma Ibi

Ibi amanecía en la jornada de ayer sumida bajo el loco mandato de «Els Enfarinats». A primera hora de la mañana, este grupo de hombres ataviados con llamativas vestimentas y con las caras pintadas se reunía en la puerta del Ayuntamiento para asaltan la emisora local y disputarse la vara de mando con la «oposició» en una calurosa carrera.

Tras esta lucha de poderes, el alcalde del municipio, Rafael Serralta hizo entrega de la vara de mando al alcalde de «Els Enfarinats» Héctor Guillem. Con el poder en la mano el nuevo gobierno tomó la sala de plenos para conformar a su nueva y peculiar corporación y dictar sus nuevas leyes, entre las que figura la más tradicional en la que «queda prohibido circular por el sol y por la sombra, por la calzada y por la acera, y por los tejados, solo se puede circular por alguna era». Unas premisas que sirven para imponer multas económicas con un fin benéfico. Al final de la mañana y tras la comida «Els Enfarinats» acudieron al asilo de San Joaquín para hacer entrega de la cantidad recaudada durante la jornada.

Huevos, harina y cohetes

En total 1.600 kilogramos de harina, 50 extintores, 3.000 huevos y 4.800 petardos fueron los ingredientes utilizados en la gran batalla entre «Enfarinats» y «Oposició». Antes de iniciar la multitudinaria lucha ambos bandos rindieron homenaje al fallecido Ramón Mira, enfarinat y amante de esta fiesta. Con una figura de cartón pluma a tamaño real de Ramón, ataviado con su indumentaria de «Enfarinat», encendieron unos cohetes para recordar su gran contribución a esta fiesta en la que el ibense participó durante muchos años.

A continuación realizaron el juicio sumarísimo y dieron rienda suelta a la batalla. La lucha de huevos, harina y pólvora fue presenciada por una multitud de público.

El edil de Fiestas y Tradiciones, Luis Vicente Martí, indicaba que «la jornada ha transcurrido sin incidentes, se han tenido que hacer 15 atenciones por quemaduras leves y sobre todo para lavar los ojos a algunos 'Enfarinats' que sufrieron irritaciones por el polvo de la harina».

En relación al aumento de protección puesto en marcha este año, con la instalación de una lona en la fachada de la Iglesia, se mostraba muy satisfecho. «Ha sido una inversión de más de 13.000 euros, pero hemos visto que los impactos del huevo, que es lo que más preocupaba, se han evitado por completo». También puntualizaba que «la oposición ha cambiado la ubicación de su munición frente al Casal Fester, lo que ha hecho que la escalera de la Iglesia quedara menos sucia y se perjudicara menos a pesar de que este año también se recubrió».

Como novedad el Consistorio también acotó con mayor claridad las zonas en las que se llevó a cabo la batalla para que el público fuera consciente del peligro una vez dentro de la zona de manejo de cohetes, eximiendo así de toda responsabilidad a la institución.

Respecto a la limpieza total de la plaza indicaba que «nada más terminar la batalla los camiones de limpieza han empezado a actuar para dejar la plaza completamente limpia en el menor tiempo posible».

Luis Vicente explicaba además que «tras la batalla he hablado tanto con «Enfarinats» como con la oposición y ambos han valorado muy positivamente los cambios y mejoras que se han aplicado este año. Ahora esperamos que no haya quejas por parte de ningún vecino y que todo quede evaluado de forma positiva como hasta el momento».

El edil destacaba la gran cantidad de público y los más de cien medios que cubrieron la festividad. Martí animaba «a la gente a que además de «Els Enfarinats» conozca el resto de actos, mañana tendremos el segundo día de Danses que empezará a las 17.00 horas en la calle les Eres y continuará a las 22.30 horas en el polideportivo municipal».