Las tormentas han causado la pérdida de cerca de 100 toneladas de cerezas en la comarca de El Comtat. Los destrozos se han centrado en la zona de Planes y Margarida, donde esta semana se han registrado trombas de granizo. El perjuicio económico supera los 300.000 euros y supone el primer tropiezo para una campaña que este año se presentaban con muy buenas perspectivas de cosecha.
La provincia, tal y como ya informó este diario, iniciaba a principios de este mes la que todo parecía indicar que iba a ser la mejor campaña de cerezas de la última década. Superados los años de la sequía, todo apuntaba a que este ejercicio se iban a poder recoger 3,5 millones de kilos, lo que supondría alcanzar el 90% del potencial de toda la zona productora. Con todo, desde el sector también se advertía que esta producción sólo sería posible en el caso de que no se registrara ninguna incidencia, teniendo en cuenta que la cereza es una fruta muy sensible a fenómenos meteorológicos como la lluvia y, evidentemente, el granizo.
Pues bien, como si de un presagio se tratara, el primer tropiezo en este sentido ya ha tenido lugar. Ha sido esta semana, como consecuencia de las tormentas registradas en la comarca de El Comtat, y más en concreto en la zona de Planes y Margarida, donde el pasado martes se recogieron 54 litros de agua por metro cuadrado en solo tres cuartos de hora, en algunos puntos en forma de granizo.
Este es el caso del Barranc de l'Encantà y el entorno de Margarida, donde según la información a la que ha tenido acceso este diario, los daños pueden haber afectado a cerca de 100 toneladas de cerezas. La fruta ha resultado muy afectada en estos puntos como consecuencia del impacto del granizo, por lo que ha quedado inservible para su comercialización.
Las pérdidas a nivel económico superarán los 300.000 euros, teniendo en cuenta los precios que se están pagando en el mercado a estas alturas de la campaña. Algunos agricultores, no obstante, podrán recuperar parte del dinero a través de sus pólizas de seguro agrario. De hecho, esta misma semana está previsto que los peritos recorran los bancales afectados.
Cabe recordar que precisamente esta comarca ya había registrado algunas mermas en la cosecha antes de que empezara la recolección, como conscuencia de la falta de lluvias y de algunas heladas en parcelas situadas en zonas bajas.
Se espera que hasta el final de campaña no se produzcan nuevas incidencias, lo que permitiría mantener la producción provincial en unos buenos niveles.
