El párroco de Santiago Apóstol en Ibi, Manuel Chouciño, está poniendo en marcha un centro de ocio para jóvenes de entre 9 y 18 años en una antigua fábrica de plásticos. La iniciativa cuenta con el respaldo económico de una veintena de empresas, así como con la colaboración desinteresada de un centenar de personas.
La nave ocupa 1.000 metros cuadrados, los cuales han sido divididos en una tetería y una sala de conciertos y en la que realizar actividades deportivas. Además, la antigua industria cuenta con una vivienda anexa, en la que están habilitando salas de estudio.
La idea es que de lunes a viernes los jóvenes del municipio puedan repasar las materias que imparten en los centros educativos, realizar trabajos en grupo e, incluso, consultar dudas a una persona que estará allí para tal fin.
A partir del viernes por la tarde «los chavales pueden venir a jugar a fútbol, baloncesto, juegos de mesa, realizar talleres de Dj o de youtuber, o simplemente pasar el rato en la tetería», ha explicado Chouciño, quien ha insistido en que el objetivo es que «tengan un sitio de ocio y que no estén en la calle o en cocheras».
Las instalaciones cuentan con una zona trasera al aire libre en la que están construyendo una barbacoa y una zona de sombra, y «vamos a montar una piscina».
Siempre que el centro esté abierto contará con varios monitores que organizarán actividades y velarán por que todo funcione correctamente.