La empresa adjudicataria del servicio de la basura en Castalla está soterrando los contenedores para retirar la recogida puerta por puerta. Las obras ya están en marcha, pese al rechazo de los vecinos, y se prevé que concluyen antes de finalizar la primavera. Los técnicos municipales explicaron a los ciudadanos que la medida es más higiénica y eficiente.
Tal y como avanzó este diario, el soterramiento de los contenedores de basura provocó el rechazo vecinal. Tanto es así, que el pasado verano el Ayuntamiento paralizó el proyecto para estudiar las quejas de los ciudadanos, pero se trata de una de las cláusulas de la contrata y, según explicó en su momento el alcalde Antonio Bernabeu, no cumplirla supondría un elevado coste para las arcas municipales.
Después de más de medio año las obras ya están en marcha y se prevé que la actuación se complete antes de que finalice la primavera. Cabe recordar que para determinar la ubicación de los contenedores ha sido necesario realizar un análisis del subsuelo de las calles, a fin de determinar los lugares idóneos. «No se pueden poner en cualquier sitio, hay tuberías y conducciones subterráneas y hay que ir con cuidado», ha recalcado el primer edil.
Ante el malestar vecinal, recientemente el Ayuntamiento organizó un acto al que asistieron los técnicos municipales para resolver las dudas de todo aquel ciudadano que quisiese asistir. Sin embargo, Antonio Bernabeu ha reconocido que participaron «muy pocas personas, pese a la difusión que tuvo el acto».
«Nadie quiere tener delante de su casa los contenedores, pero los técnicos han asegurado que son herméticos, que se retirarán los residuos a diario y que son más higiénicos y eficientes», ha insistido el alcalde.
Las obras de soterramiento se están llevando a cabo en las zonas anchas del casco urbano, sin embargo, en el centro histórico «la empresa colocará contenedores con ruedas para poder cambiarlos de sitio», a fin de evitar molestias a los vecinos, según ha explicado Bernabeu.
Con todo, el primer edil también ha asegurado que están atendiendo las sugerencias de los ciudadanos y reubicando algunos contenedores, pero no todas las propuestas pueden materializarse por las conducciones subterráneas.
En cualquier caso, ha insistido en que esta actuación forma parte de la contrata que aprobó la anterior corporación municipal. Por ello, el coste viene determinado en las condiciones de éste, en el que se contempla un incremento de las cuotas mensuales que el Ayuntamiento abona a la empresa adjudicataria.
