Gobierno y festeros han empezado a limar asperezas en relación a la nueva normativa de la pólvora. El subdelegado, José Miguel Saval, ha planteado la posibilidad de que los fabricantes del explosivo lo distribuyan ya en el interior de las cantimploras, medida ésta que eliminaría el controvertido trasvase en el lugar de reparto. Fue ayer en el transcurso de una reunión mantenida con responsables de la Unión Nacional de Enrtidades Festeras (Undef), quienes de entrada no han visto con malos ojos la iniciativa.
Tal y como ha venido informando este diario, la dirección general de Minas del Ministerio de Energía remitía recientemente un escrito a la UNDEF, a través del cual desestimaba las peticiones cursadas para introducir cambios en la nueva normativa de la pólvora.
Una de las principales preocupaciones de la entidad, sino la que más, radica en la obligación de trasvasar la pólvora a las cantimploras en el mismo lugar de reparto, al entender que se van a generar situaciones de alto riesgo.
Pues bien, precisamente este asunto fue abordado ayer en una reunión celebrada entre el subdelegado del Gobierno en la provincia de Alicante, José Miguel Saval, y varios responsables de la UNDEF encabezados por su presidenta, Pepa Prats.
Fuentes de la subdelegación explicaban que se había puesto encima de la mesa la posibilidad de que los fabricantes de pólvora la envasen directamente en origen en las cantimploras, de manera que no sea necesario el controvertido trasvase en el lugar de reparto. Los festeros, consecuentemente, recogerían la pólvora ya en el interior de la cantimplora, que, como marca la normativa, también estaría precintada.
El próximo movimiento para concretar la viabilidad de la iniciativa será una reunión con los fabricantes, para analizar pros y contras. Faltaría también por analizar si los festeros recogerían la cantimplora a cambio de entregar otra -como si de una botella de butano se tratara-, o bien depositan una fianza que les sería reintegrada en el momento en que devolvieran el recipiente ya vacío.
Desde la subdelegación se defiende esta medida porque evitaría el trasvase y, al mismo tiempo, no resultaría necesaria una modificación de la normativa.
Por parte de la UNDEF, su presidenta, Pepa Prats, destacaba que la propuesta tendrá que ser analizada por la comisión que se encarga de este asunto. Con todo, y de entrada, destacó que la medida «no me parece descabellada», y que «quitaría peligro, que es una de las cosas que más nos preocupa».
Prats destacó que por parte de la entidad también se pusieron ayer encima de la mesa otras cuestiones, como las complicaciones que existen para encontrar un lugar de reparto que cumpla con las distancias que marca la normativa, y también la posibilidad de ampliar el período máximo que se señala a los participantes para almacenar la pólvora en sus casas, dado que con el actual es necesario un segundo reparto.
