La Protectora de Animales y Plantas de Alcoy ha expresado su rechazo a que el albergue canino sea utilizado para el reparto de la pólvora que se va a disparar en el Alardo de las Fiestas de Moros y Cristianos. La entidad ha remitido una carta al Ayuntamiento en la que muestra su repulsa ante la peligrosidad que implica y las repercusiones que puede tener sobre los trabajadores y los perros y gatos allí alojados.
Tal y como ya se informó, el próximo año está previsto llevar a cabo el reparto de la pólvora en el albergue de animales, en una medida con la que se pretende duplicar la cantidad de explosivo que se podrá disparar en el Alardo. El recinto, según se ha explicado, reúne los requisitos que establece la nueva normativa.
La medida, sin embargo, ha tropezado con la oposición de la Protectiora de Animales, encargada de gestionar el albergue. En una carta que ha sido remitioda al Ayuntamiento, la entidad quiere hacer constar «su repulsa ante la peligrosidad que implica y las repercusiones que puede tener sobre nuestros trabajadores y los animalesd allí alojados». Asimismo, solicita que se documente la legalidad de la iniciativa, en base a que además de los 200 animales alojados hay dos personas trabajando, y pide información respecto a la cantidad de explosivo a almacenar, las medidas de seguridad a adoptar y la duración.
En declaraciones a este diario, el presidente de la Protectora, Gonzalo Gisbert, destaca que «con el uso que se le va a dar se equipara el albergue con un polvorín», y añade que aparte de la peligrosidad, «se va a alterar la rutina de los animales, que no podrán salir de sus compartimentos en dos días».
Como alternativa, Gisbert plantea la posibilidad de «utilizar el túnel de la vía verde situado junto al polideportivo en dirección a Ibi. Sería mucho más adecuado».
Por su parte, el concejal de Fiestas, Raül Llopis, señala que pese a que ya se habló con la Protectora, volverán a hacerlo «para aclarar dudas y solucionar problemas».
