Los alcaldes de las poblaciones de Penàguila, Alcoleja, Benasau y Benilloba han expresado su preocupación por la que consideran «progresiva retirada» del Banco de Sabadell, que señalan ha cerrado oficinas sustituyéndolas por cajeros automáticos y acaba de reducir la oferta de la sucursal del último municipio que ahora está operativa tres días a la semana con un único empleado.

Para los alcaldes, la situación se debe a que el banco aplica «criterios de rentabilidad económica», sin tener en cuenta la realidad social, integrada por personas mayores, «con dificultades para trasladarse a Cocentaina, por ejemplo».

La alcaldesa de Benilloba Ana Dèlia Gisbert ha mantenido recientemente una entrevista con la responsable de zona.

«Única entidad presente»

Desde el Banco de Sabadell se subraya, por su parte, que es la única entidad de ahorro presente en las poblaciones y que ofrece un servicio adecuado a la demanda, que está trabajando para consolidar.