La realización de un simulacro de incendio en el geriátrico Pintor Sala, en el centro de Alcoy, evidenció los problemas que tienen los camiones de los bomberos para moverse por la zona, por la estrechez de las calles. Aún así, los vehículos pudieron llegar hasta el complejo, situado junto a la plaza de Correos.
«Queríamos que fuese lo más real posible», explicó a este diario el intendente de la Policía Local Carlos Martín, mientras coordinaba el despliegue de medios a las puertas del centro. Efectivos de la Policía, los Bomberos de La Montaña -con un despliegue con las sirenas que provocó no poca inquietud-, la Cruz Roja y Protección Civil acudieron al recinto, donde buena parte de los internos se habían «refugiado» en el patio.
El ensayo sirvió para «tomar nota» de las incidencias registradas en el despliegue.
