Todos los años, en el mes de abril, cuando finalizan las Fiestas de Moros y Cristianos de Alcoy Fiestas de Moros y Cristianos de Alcoycomienza el ritual de desmontar la enramada de las calles del centro de la ciudad y el castillo situado en la Bandeja de la plaza de España y guardarlo hasta el próximo año. La mayoría de los alcoyanos, quizás, se han preguntado alguna vez dónde se «encierra» todo este material durante los nueves meses que esta decoración festera no está al aire libre. La respuesta radica en una gran nave situada en la zona alta donde los tramos, creados con hierro y aluminio, con sus característicos arcos llenos de luces descansan sobre unas barras. Cada elemento tiene asignado un número que corresponde a los distintos puntos de varias calles del centro donde se instalan para las Fiestas. Así , por ejemplo, en la parte izquierda del local está ocupada por la enramada que se coloca en la plaza de España (ésta está culminada con almenas de madera) y las que solo tienen un arco que se cuelgan en las calles más estrechas, como la calle Mayor, la calle San Miguel -frente al Casal de Sant Jordi- o l'Escola. En la parte derecha se observa, entre otros, la larga enramada que se incorpora a lo largo de calle San Nicolás o en la avenida del País Valencià.
Son 145 tramos con sus respectivas luces, en total habrá unas 30.000 bombillas, los que desde mayo hasta febrero «duermen» en este enclave municipal y ahora están a punto de abandonar. Y es que a partir de este lunes por la noche, los trabajadores de la brigada de obras del Ayuntamiento comenzarán a instalar esta decoración en la vía pública para que esté lista para el 27 de marzo, día en el que Alcoy pregonará las Fiestas de Moros y Cristianos con el desfile de la Gloria.
Este momento es muy esperado, sobre todo por los festeros, porque cuando ya empiezas a ver por las calles está característica ornamentación simboliza que la Trilogía se acerca. Así, que está ilusión de que lleguen los días grandes en honor a San Jorge queda guardada en el almacén municipal durante gran parte del año y ahora está a punto de cumplirse.
Asimismo, pronto el castillo de Fiestas presidirá la plaza de España. De momento, esta fortaleza está guardada en el local municipal del Camí y arropada por la misma enramada. Las piezas de madera que la componen, la puerta y la torre están ordenadas por secciones junto al caballo -tapado con un plástico- que utiliza el niños que representa San Jordiet para tirar las flechas. Aunque este último año también se incorporó a la familia el corcel de madera en el que te podías hacer un «selfi» durante la visita al castillo.
La operarios de la brigada de obras y los electricistas municipales son los encargados de cuidar y mantener la enramada y el castillo durante todo el año y en las próximas semanas realizarán un importante trabajo para que toda esta ornamentación luzca en las calles y sea testigo de la entrada de las tropas de la cruz y las huestes de la media luna.
