Uno de los juguetes más emblemáticos de todos los tiempos, como es Magia Borrás, también ha sufrido los efectos de las falsificaciones. La caja y los componentes fueron reproducidos fielmente, aunque la inferior calidad de los mismos hacía imposible realizar muchos de los trucos de magia.
El producto de Educa Borrás, con sedes en Barcelona e Ibi, fue plagiado en 2004. Un empleado de la empresa se sorprendió al ver en una juguetería una caja de Magia Borrás a un precio de 4,90 euros, unos 10 menos del precio de venta habitual. Tras fijarse más atentamente, vio que en realidad en la caja ponía «Magia Funny» en lugar de «Magia Borrás».
El diseño del envoltorio había sido reproducido fielmente, así como los componentes del juego que estaban dentro. La única indicación de que no se trataba del producto auténtico era la palabra «Funny». Sin embargo, la equivalencia del contenido solo era aparente. Los componentes copiados eran de inferior calidad, por lo que resultaba imposible hacer muchos trucos.
Tras la denuncia presentada por la empresa, el juez ordenó el cese inmediato de la comercialización y la retirada del mercado de todas las existencias sin vender. Asimismo, se ordenó al importador de la falsificación, procedente de China, el pago de 14.486 euros.
