La Ordenanza de las Fiestas de Moros y Cristianos de Alcoy, en su artículo 54, es clara: «cuando los hombres y mujeres desfilen formando escuadras, no se admitirá que sean mixtos, por lo que estas formaciones diferenciarán los participantes masculinos de los femeninos». Así, se obligaba normativamente que las escuadras fuesen del mismo sexo, una disposición que tiene ya más de diez años y que se habilitó cuando se acordó crear los atuendos femeninos en las filaes. La combinación de ambas medidas ha impedido, por ejemplo, que la primera mujer festera Nuria Martínez, haya podido desfilar con su filà, los Alcodianos, ya que no tiene diez «compañeras» con las que completar la escuadra.
Esto podría cambiar a corto plazo si la Asociación de San Jorge refrenda la propuesta de reforma de sus Estatutos, con la redacción propuesta por el equipo jurídico. La clave está, según se interpreta en sectores festeros, en la redacción del artículo 92, que añade textualmente: «todas las modalidades de participación, influidas las económicas, serán iguales sin distinción de sexo».
En medios festeros consultados por este diario se interpreta que con esta redacción se valida que pueda haber escuadras mixtas, ya que de denegar un puesto en una formación a un festero -sea hombre o mujer- en aplicación de la Ordenanza se vulneraría el Estatuto, que tiene un rango «superior». Es decir, se considera que una normativa de aplicación, como es la Ordenanza, no puede soslayar un «derecho» como es la participación «igualitaria» que fija el Estatuto, entendida como la norma «suprema» en el seno de la Asociación de San Jorge y las Fiestas.
En consecuencia, si prospera la reforma en sus actuales términos, en medios festeros se interpreta que no se podría denegar la escuadra a Nuria Martínez en la Filà Alcodianos con la justificación de que la Ordenanza lo impide, ya que iría contra el Estatuto. Más aún, si a una festera le correspondiese la Gloria, se entiende que debería aplicarse el mismo argumento.
A pesar de que las Fiestas han registrado una masiva incorporación de mujeres como festeras de pleno derecho a las filaes en los últimos años, sólo los Marrakesch han podido sacar una escuadra a la calle al contar con once componentes. También lo hicieron los Realistas, pero no de manera oficial, aunque esta filà, como indicó este diario, tiene desde el verano 11 festeras de pleno derecho. Por ello, ya podrán hacer escuadras con plenos derechos cuando les corresponda.
Al margen hay otras festeras, incorporadas desde hace años a las filaes, que no han podido disfrutar de derechos por su soledad. A Nuria Martínez, por ejemplo, le toca escuadra en la Entrada Cristiana desde 2010, pero no ha podido desempeñarla; con la nueva normativa, algunos interpretan que podría hacerla porque en caso contrario se incurría en discriminación.
Hay que recordar que otra festera, Herminia Blanquer, fue objeto de uno de los mayores escándalos de la historia contemporánea de las Fiestas de Moros y Cristianos: le tocó la escuadra en la Filà Navarros en 2002, pero se convocó una asamblea extraordinaria y se acordó cambiar la normativa interna, prohibiendo las escuadras mixtas, en plenas vísperas de las Fiestas. La afectada declinó recurrir a los tribunales.
La reforma de estatutos está ahora en fase de estudio por las filaes y los estamentos festeros, habiéndose previsto hasta fin de año la presentación de sugerencias o alegaciones, paso previo para su debate y aprobación.
