El Ayuntamiento de Alcoy cederá el centro de enfermos mentales del Barranquet a la Generalitat, para que sea ésta la que se haga cargo de la gestión del servicio. Así se acordó ayer en una reunión mantenida entre representantes municipales y de la Conselleria de Bienestar Social, lo que evitará a las arcas municipales un gasto anual cercano a los dos millones de euros.
El alcalde, Antonio Francés, y la concejal de Políticas Sociales y Salud Pública, Aroa Mira, se desplazaron ayer a Valencia para entrevistarse con el director general de Diversidad Funcional, Antonio Raya. En el transcurso del encuentro se acordó el inicio de los trámites para la cesión del centro de enfermos mentales del Barranquet a la Generalitat, de manera que sea la administración autonómica la que se haga cargo de la gestión del servicio.
Aroa Mira mostró su satisfacción por el resultado de la reunión, sobre la base de que «han atendido nuestra solicitud. Entendíamos que el Ayuntamiento no tenía que gestionar este recurso como pretendía el anterior gobierno autonómico, porque por un lado no es justo y por otro no forma parte de sus competencias. Afortunadamente, ellos lo han entendido también así y, tras consumar la recepción de las obras del complejo, vamos a iniciar los trámites para la cesión».
El acuerdo va a evitar a las arcas municipales un gasto cercano a los dos millones de euros anuales, según los cálculos que manejaba el Ayuntamiento.
De momento no se ha precisado una fecha concreta para la apertura del centro, aunque según la edil, «ambas partes nos hemos comprometido a acelerar al máximo las gestiones para que sea lo antes posible. Sabemos que se trata de un servicio muy importante para los enfermos y sus familias, que ya llevan mucho tiempo esperando».
