El Ayuntamiento de Alcoy va a solicitar a la Conselleria de Bienestar Social que asuma la gestión del centro de enfermos mentales del Barranquet, sobre la base de que se trata de un servicio público. Las obras, tanto del inmueble como de la urbanización, han quedado terminadas cuatro años después de la fecha prevista y se tramita su recepción.
Las obras del centro de enfermos mentales del Barranquet han quedado por fin concluidas. Las instalaciones, con 40 plazas de residencia y 20 de centro de día, empezaron a construirse en verano de 2010 con un plazo de ejecución de entre 36 y 40 semanas, por lo que a mediados de 2011 tendrían que haber terminado. Sin embargo, los impagos por parte del Consell para cubrir el coste de 3,6 millones de euros han venido propiciando sucesivas paralizaciones de los trabajos, que al final han derivado en un retraso de nada menos que cuatro años.
Tanto el edificio como la urbanización de los terrenos están terminados, con lo que según informaba la concejal de Políticas Sociales y Salud Pública, Aroa Mira, en estos momentos se tramita la recepción de las obras.
El objetivo inmediato en estos momentos es el equipamiento del centro, para lo cual se espera que se puedan recibir fondos de un programa de ayudas que acaba de ser convocado por la Generalitat.
Con todo, el Ayuntamiento está a la espera de una reunión con responsables de la Conselleria de Bienestar, al objeto de abordar el futuro inmediato del centro de enfermos mentales.
Según manifestaba Aroa Mira, la intención municipal pasa por que la Generalitat asuma directamente la gestión. «Se trata -enfatizó- de un servicio público, y como tal entendemos que debe ser la propia conselleria la que se haga cargo del mismo».
La alternativa, planteada por el anterior gobierno autonómico, consistiría en que el Ayuntamiento asumiera la gestión a través de la contratación de una empresa privada, «pero -destacó Mira- no nos parece adecuado, insisto, porque se trata de un recurso público, y además porque estamos hablando de cerca de dos millones de euros al año».
La concejal, en cualquier caso, considera que las cosas han cambiado con la entrada del nuevo ejecutivo de la Generalitat, «y confiamos en llegar a un acuerdo para que el centro entre en funcionamiento lo antes posible».
