Un centenar de voluntarios trabajará este verano en el paraje de Xorret de Catí, entre los términos municipales de Castalla y Petrer, con el objetivo de prevenir incendios forestales. Los participantes en esta iniciativa de la Diputación de Alicante llevarán a cabo labores de vigilancia y limpieza en este valioso espacio natural enclavado en la Sierra del Maigmó.

La Diputación ha puesto en marcha una nueva edición del campo de voluntariado de Xorret de Catí, que este año se desarrollará del 1 de julio al 31 de agosto. El objetivo de la iniciativa es prevenir los incendios forestales, además de informar y concienciar a los visitantes que se desplacen al paraje de la importancia de salvaguardar el medio ambiente.

Entre las tareas que llevarán a cabo las personas que participen destaca la vigilancia de la zona y la limpieza de diversos espacios. Además, los voluntarios tendrán la oportunidad de realizar actividades formativas y de esparcimiento relacionadas con el entorno, la protección de los espacios naturales y los primeros auxilios, entre otras. Las tareas se desarrollarán a través de turnos de diez días.

El diputado de Medio Ambiente, Javier Sendra, destacaba la importancia de este campo de voluntariado, «en el que no sólo se trabaja para prevenir los incendios forestales, sino también para conservar y recuperar nuestro entorno natural y educar medioambientalmente a los visitantes».

Los participantes, a los que se les dotará de material de comunicación, vehículos todoterreno, alojamiento y manutención, contarán con monitores especializados que se encargarán de la organización diaria, la distribución de los equipos y la formación.

Los interesados en participar, siempre y cuando tengan más de 18 años, pueden consultar más información e incribirse a través del teléfono 965376231.

«Estos campos de voluntariado persiguen objetivos como informar de los comportamientos adecuados con el medio ambiente, prevenir acciones de riesgo forestal y fomentar el cuidado y respeto a la naturaleza. Junto a la prevención, también se fomenta la integración de las personas con discapacidad», explicó Sendra.

Desde su inauguración hace ya diez años, más de 1.300 personas con edades comprendidas entre 18 y 53 años han participado de manera altruista en estas actividades.