El incremento salarial reclamado por los sindicatos ha propiciado un clima de enfrentamiento con la patronal en la negociación del convenio del sector textil. Las centrales solicitan un incremento superior al 1% en una apuesta por contribuir a la recuperación económica, mientras que las empresas sólo quieren la congelación. Los representantes de los trabajadores esperan llegar a un acuerdo antes del verano, dado que en caso contrario se plantearían el inicio de movilizaciones.
El arranque de las negociaciones en el convenio del textil se está viendo marcado por las posturas distantes entre los sindicatos CCOO y UGT y la patronal, sobre todo en lo que respecta al tema salarial. Según explicaba Miguel Ángel Castelló, secretario general de la Federación de Industria de CCOO en las Comarcas Centrales Valencianas, «solicitamos un incremento superior al 1%, porque con salarios recortados es imposible recuperar la economía y los mercados, y nos vamos a ver abocados a no salir nunca de la crisis».
La patronal, sin embargo, no es de esta opinión, toda vez que apuesta por una congelación de los sueldos argumentada en que la situación de las empresas todavía es muy delicada, fruto de la complicada coyuntura económica que se viene registrando en los últimos tiempos.
Cabe reseñar, en relación a este asunto, que en el convenio del año pasado se aprobó un aumento del 0,4%, «un porcentaje -resaltó Castelló- que no es muy elevado, aunque teniendo en cuenta el comportamiento del IPC, logramos salir del atolladero».
Otro caballo de batalla para los sindicatos va a ser el de las horas efectivas de trabajo. En la actualidad los trabajadores con jornada continua realizan 1.762 horas anuales, mientras que en el caso de los de jornada partida se eleva hasta 1.800. «No tiene sentido, y aunque sea de forma progresiva, es de justicia que se realicen las mismas horas», manifestó el representante sindical.
Las centrales, de igual forma, solicitan que los complementos salariales del 100% que se aplican en caso de accidente de trabajo, también se hagan extensivos a las enfermedades profesionales y a los accidentes que se producen en el trayecto de la empresa a casa y viceversa.
Otra reivindicación sindical pasa por lograr que el acuerdo en el convenio sirva para todos los subsectores del textil, y que no suceda lo mismo que el año pasado, cuando los representantes empresariales de dos de ellos se negaron a firmar.
Los sindicatos quieren un acuerdo antes del verano. «Llegados a estas fechas tenemos que saber si hay convenio o tenemos que emprender movilizaciones», enfatizó Castelló.
