La Conselleria de Justicia ha consentido que los juzgados de Alcoy prácticamente se hayan bloqueado, tras haber permanecido el servicio común de notificaciones dos semanas sin personal, por causa de un traslado y una baja que no fueron cubiertos. Ayer se incorporó un trabajador al servicio, pero entre los profesionales de la justicia se considera que harán falta «semanas» para que el trabajo acumulado pueda normalizarse.
Los cuatro juzgados de Alcoy han alcanzado una situación de auténtico bloqueo por falta de personal en el servicio común del decanato, el órgano que sella los papeles que entran al Palacio de Justicia y que pone en marcha su tramitación. Este departamento, según explican las fuentes consultadas, está atendido por dos trabajadores, de los cuales uno pidió el traslado de departamento, que se consumó el 10 de este mes, lo que coincidió con la baja laboral del otro.
El día 11 de noviembre, el servicio común amaneció sin personal, estableciéndose de urgencia la presencia de un trabajador de otro departamento que, a primera y última hora de la mañana, acudía al servicio común y procedía a la tramitación de lo más urgente, sobre todo cuestiones con detenidos o violencia de género. «Entre tanto, los papeles se iban amontonando en el despacho», significaron las referidas fuentes.
Las gestiones desarrolladas ante la Conselleria de Justicia, incluso a cargo del propio juez decano, resultaron baldías conforme iban pasando los días, en los que crecía la preocupación y el malestar entre los profesionales de la justicia. «No se registraba nada, salvo lo más urgente, de todo el papel que entraba», resaltaron. «Y solamente con un cuño, sin forma autógrafa», agregaron.
A finales de la pasada semana el malestar empezaba a convertirse en indignación, sobre todo por la falta de cobertura de la trabajadora que había solicitado el traslado. «Puede entenderse que una baja sea algo imprevisto y que cueste de atender, pero no en el caso del traslado, que estaba autorizado y que la propia conselleria lo conocía», reiteraron las citadas fuentes.
Todo apuntaba que ayer, a primera hora, iban a intensificarse las protestas, especialmente por parte de los sectores profesionales involucrados, como abogados y procuradores, pero se encontraron con que Justicia había asignado un trabajador a este servicio, con lo que ha podido empezar a operar. De todas formas, los propios interesados han significado que el material acumulado tardará bastante tiempo en poderse poner al día, sobre todo si se mantiene la ausencia de uno de los trabajadores.
«Somos los últimos de la lista», señalaban desde los colectivos profesionales, significando los problemas registrados en los últimos tiempos, como la falta de calefacción en los juzgados al acabarse el gasoil.
