El arte es para el disfrute colectivo, pero muchas veces el valor o simplemente la indisponibilidad -por ejemplo, obras semiocultas en dependencias poco accesibles- lo sustraen de la mirada global. En esto radica el interés de la exposición que se inauguró en la tarde de ayer en el Centro Cultural de Alcoy; en la posibilidad de contemplar obras, por ejemplo de Josep Mongrell, alejadas de las áreas públicas. La muestra se ha preparado por el 30 aniversario del referido Centro Cultural, tras dejar de ser Banco de España.

El alcalde Antonio Francés -que recordó la labor de los ediles del Bloc Anna Serrano y Paco Blay-, junto al edil de Cultura Paco Agulló, inauguró a última hora de ayer la exposición, que recoge la mayor parte de la cincuentena de obras que configuran el patrimonio pictórico municipal.

Como explicaron el director del Centro Miquel Santamaría y el del Museo Arqueológico Josep Maria Segura, solamente se han dejado en su sitio las que por su tamaño con complicadas -y muy caras- de mover, como los cuadros de Fernando Cabrera en la biblioteca o en el Ayuntamiento. Tampoco se han desplazado obras antiguas exhibidas en la iglesia de la Mare de Déu, cerrada por el momento.

En cambio, el visitante puede encontrarse con creaciones que solamente pueden contemplarse de manera habitual si se acude a los despachos del alcalde, diferentes concejales y algunos altos funcionarios municipales. Por ejemplo, se exhibe un pequeño cuadro de Josep Mongrell que está catalogado como uno de las piezas más valiosas de la colección, u otra de Emilio Sala del despacho de Alcaldía; en tercer lugar, se expone un diminuto lienzo de Edmundo Jordá, que a veces pasa desapercibido en la escalinata del Ayuntamiento, entre los grandes cuadros de Ramón Castañer y Fernando Cabrera.

Esta muestra, además, aporta una interesante perspectiva histórica, ya que muestra cuadros desde el siglo XVI hasta la década de 1930. Los más antiguos son anónimos en su mayoría y con una temática generalmente religiosa, y pueden observarse todos en el catálogo que se ha editado para permitir su difusión en el futuro, una vez la exposición haya concluido; además, está disponible en pdf en internet.

Así, en el Centro Cultural se exhiben hasta el 25 de mayo obras de pintores que no necesitan presentación como Antonio Gisbert, Lorenzo Casanova, Emilio Sala o el propio Fernando Cabrera, junto con otras de Lorenzo Pericás, Adolfo Durá, Antonio Santonja, Lorenzo Ridaura, Antonia de Bañuelos, Vicent Castelló y los ya citados Mongrell y Jordá.

Paralelamente, se ha montado una muestra de 30 años de cartelística, para recopilar la historia del Centro Cultural, y que también fue presentada ayer tarde. En este caso se ha seleccionado una obra por año, recogiendo en muchos casos trabajos de autores desaparecidos como Solbes, Alfaro, Tàpies o Joan Miró.