El escenario del centro cultural El Teular de Cocentaina verá mejorada su acústica interior merced a un recubrimiento nada habitual. Se trata, en concreto, de un tejido desarrollado por la Escuela Politécnica Superior de Gandia y el Instituto Tecnológico Textil (AITEX) de Alcoy, cuya característica principal es que está elaborado con una fibra de poliéster obtenida a través del reciclado de botellas de plástico.

Un grupo de investigadores de la Escuela Politécnica Superior de Gandia de la Universidad Politécnica de Valencia, liderado por Jesús Alba, lleva trabajando desde hace varios años con AITEX y empresas textiles interesadas en diseñar nuevos productos con base textil que puedan usarse en edificación.

Fruto del trabajo de investigación es un material absorbente acústico basado en fibra de poliéster obtenida del reciclado de botellas de plástico. Este novedoso material, fabricado y distribuido por la empresa Piel, es el que actualmente se está instalando para mejorar la acústica interior del escenario del centro cultural El Teular de Cocentaina.

Según la información facilitada desde el grupo de investigadores, se trata de un material que cumple con todas las normatibas de edificación -fuego y salubridad-, es un producto textil, por lo que es agradable al tacto, y es válido para su uso en la absorción sonora dentro de los recintos o para mejorar el aislamiento acústico de las paredes.

El producto es el resultado de una innovación tecnológica, que ha convertido desechos de botellas de plástico en una solución acústica que mejora en algunas propiedades a otros materiales más agresivos con el medio ambiente.

El tejido ya ha sido probado con éxito en una sala cultural del municipio valenciano de Aielo de Malferit, si bien El Teular de Cocentaina será el primer escenario de gran formato en el que se vaya a implantar este material.

La concejal de Cultura contestana, Rosa Sellés, destacó que lo que se pretende con esta iniciativa es mejorar la acústica interna del escenario. Según sus palabras, "el sonido que llega a la sala de butacas es excelente, pero no sucedía lo mismo con el interior de la caja escénica, donde los músicos percibían reverberaciones al ser el techo tan alto".

En este sentido, se ha optado por implantar este novedoso material tanto por sus excelentes prestaciones, como también por los costes. "Una concha acústica de madera hubiera supuesto un gasto cercano a los 300.000 euros, mientras que de esta forma apenas superará los 4.000", apuntó.

Destacar, por último, que Jesús Alba, responsable del proyecto de investigación, es secretario del Campus de Gandia y director de la cátedra del Colegio de Ingenieros Técnicos de Telecomunicación y la Acusttel de Ingeniería Acústica. Ha dirigido o colaborado en estudos acústicos relacionados con Terra Mítica, el circuito Ricardo Tormo o la Ciudad de la Luz.