La Asociación Estatal de Víctimas de Accidentes (DIA), con sede en Alcoy, está realizando el primer estudio en España sobre las necesidades psicológicas y sociales de las personas que han sufrido un percance en las carreteras. Con este estudio, financiado por la Fundación ONCE, se pretende conocer "de primera mano la verdadera dimensión de algunos problemas que afectan a las víctimas de accidentes de tráfico", según explicaron ayer fuentes de la entidad.

De este modo se identificarán las necesidades de atención psicológica y social de los afectados como de sus familiares para analizar el problema con mayor rigor y proponer una posterior estrategia de intervención más ajustada a la realidad social sobre la que se va a aplicar. Para poder llevar a cabo el estudio, DIA cuenta con la colaboración de diferentes centros hospitalarios del país, como el Ramón y Cajal de Madrid, el Hospital Son Dureta de Palma de Mallorca, el Infanta Cristina de Badajoz, el General Universitario de Valencia, el Central de Asturias y el de Navarra, entre otros.

Según las mismas fuentes, los accidentes de tráfico continúan siendo las situaciones de urgencia que más se atienden desde los servicios de emergencia. En todos los protocolos de actuación de "los servicios de urgencia predomina, obviamente, la emergencia física, pero los aspectos psicológicos apenas se han considerado", señalaron desde DIA.

"Pese a todo, han tenido que ser algunos acontecimientos catastróficos, como el 11-M, los que han puesto en evidencia que la intervención psicológica (en su mayor parte psicólogos voluntarios) de atención, orientación y contención a las víctimas ha sido eficaz y aporta beneficios tanto a corto como a largo plazo", enfatizaron.

Las consecuencias de la exposición al accidente de tráfico citados anteriormente se pueden incrementar y aparecer el síndrome por estrés postraumático, ansiedad, depresión u otros trastornos psiquiátricos, según la asociación.