La masificación de la biblioteca del campus de la Escuela Politécnica Superior de Alcoy (EPSA) en época de exámenes y una movilización de sus propios alumnos ha obligado a la dirección a vetar el acceso al recinto a los estudiantes foráneos, para lo cual se ha empezado a solicitar el carné que acredita estar matriculado en el centro. Todos los usuarios, independientemente del centro al que pertenezcan, tienen a su disposición unas aulas de estudio complementarias, que en esta época están abiertas 24 horas al día, según confirmó el director Enrique Masiá.

La Politécnica de Alcoy había registrado en los últimos días una movilización de los alumnos, a través de las redes sociales en Internet, con un total de 435 adhesiones en muy poco tiempo, según explicaron fuentes estudiantiles. La campaña consistía en el envío de correos de protesta para que la dirección tuviese conciencia de la situación y del malestar del colectivo estudiantil.

El problema, según las informaciones recabadas, ha consistido en la saturación que a determinadas horas del día registra la biblioteca, que está abarrotada. Los alumnos del campus de Alcoy expresaban su protesta ante el hecho de que el recinto estaba lleno y con muchos estudiantes de otras universidades -sobre todo Alicante y Miguel Hernández- y personas que preparaban oposiciones, como aspirantes a bomberos, en el polémico concurso que acaba de ser anulado.

El director Enrique Masiá explicó que todo esto condujo a una negociación con la Delegación de Alumnos, en la que los representantes de los estudiantes expresaron su voluntad de que se cumpliera la normativa de la universidad; es decir, que en caso de lleno, se pida el carné y se limite el acceso a los que no están matriculados en Alcoy. De hecho, las fuentes consultadas han indicado que "ese cartel está ahí desde el día en que se abrió la biblioteca, pero nunca se había llegado a aplicar".

Masiá indicó que ante el planteamiento de los estudiantes, se ha optado por solicitar la documentación para entrar en la biblioteca, "pero mantenemos las aulas de estudio -de momento dos, pero si hace falta habrá más- a disposición de todo el mundo, porque tenemos obligación de dar un servicio".

La biblioteca, paradójicamente, no está abierta las 24 horas del día, ya que "por los libros y las propias instalaciones, están supeditadas al horario de trabajo de los bibliotecarios, lo que no ocurre con las aulas de estudio".