Desbroce completo de la desembocadura del río Seco-Montnegre. El Ayuntamiento de El Campello ha realizado una limpieza del carrizo entre el puente que une las playas del Carrerlamar y Muchavista y el mar que ha sido denunciada por EU y Amigos de los Humedales del Sur de Alicante (AHSA). Consideran que este desbroce «masivo» en una zona que va a ser protegida por la Generalitat con su inclusión en el Catálogo de Zonas Húmedas de la Comunidad es desproporcionado e injustificado. En cambio, desde el Consistorio señalan que en este punto la limpieza ha sido total para evitar plagas, y que en el resto del río se ha actuado de forma selectiva, sobre todo en las zonas de los puentes, sin dañar el ecosistema.

AHSA viene reivindicando desde hace ya 20 años la protección de este enclave como zona húmeda, medida que el mes pasado la Generalitat anunció que aceptaba y que está tramitando tras haberlo solicitado el pleno a través de una moción de EU. Desde AHSA explican que «la gestión del carrizo es necesaria en cualquier humedal, y puede ser aconsejable un desbroce parcial para, por ejemplo, mantener zonas de aguas libres entre el carrizo, como entre la carretera de Muchavista y el mar, tramo que ha ocupado por completo el carrizo. Pero la eliminación total nunca está justificada, ya que es una especie que forma parte de la vegetación natural de los humedales».

Los ecologistas recuerdan que «los carrizales constituyen una formación vegetal que utilizan como hábitat y refugio distintas especies de aves durante todo el año, y en ningún caso favorece la aparición de plagas de ningún tipo como el Ayuntamiento parece señalar. Lo que se está haciendo no está teniendo en cuenta su carácter de humedal. Es absolutamente contradictorio que el Ayuntamiento apueste por su protección y que a la vez elimine su vegetación natural. El carrizo va a volver a crecer y a ocupar la zona, pero el desbroce masivo que se está haciendo no tiene justificación en un humedal que se quiere proteger. Esperamos que este tipo de desbroces masivos no se vuelvan a repetir».

Por su parte desde EU su edil Pedro Mario Pardo recordó que «no ha pasado ni un solo mes desde que se recibió la buena noticia de que se va a incluir la desembocadura del río en el catálogo, y ya tenemos que lamentar la falta de compromiso y concienciación medioambiental por parte del Ayuntamiento. La concejalía de Medio Ambiente debe saber que el carrizo forma parte de la vegetación natural de los humedales y constituye una formación vegetal que utilizan como hábitat y refugio distintas especies de aves. Estamos de acuerdo con el desbroce en algunas zonas pero eliminarlo por completo atenta contra la protección que decimos defender. Así se lo trasmitimos en la comisión del 17 de febrero con el objetivo de que se reconsideraran la actuación antes de agravar el daño ecológico. Y es necesario pedir al Instituto de Ecología un estudio sobre cómo conservar este paraje protegiendo su gran valor medioambiental». Además, Pardo destacó que las aves no van a tener dónde nidificar en la desembocadura tras el desbroce.

Réplica

Desde la concejalía de Medio Ambiente su edil Julio Oca (Cs) aclaró que el desbroce solo ha sido completo en el tramo final, entre el puente y el mar, para evitar plagas como las de los mosquitos, y que los trabajos en el resto del cauce han sido selectivos, centrándose en los puentes. Por ello rechazó que esta actuación haya causado perjuicios ambientales, aunque señaló que de cara a otros años plantearán dejar «islas ecológicas»de carrizo para una mejor protección del ecosistema. De cualquier forma, Oca señaló que como en toda actuación, el lunes se revisará si se ha actuado según lo previsto.

El Consistorio anunció el mes pasado esta actuación para mejorar la seguridad ante una eventual inundación, prevención de incendios y control de plagas, lamentando que en los últimos tres años no se hubiera hecho ningún desbroce. Y los trabajos empezaron en enero, «teniendo presente que el 15 de marzo se inicia el periodo de nidificación de aves», destacando cuando se anunció la medida que «es de máxima importancia ser conscientes de que el río Seco es un refugio natural para más de 40 especies distintas de aves. Un ecosistema situado entre la autopista y la desembocadura donde residen diversas aves tanto autóctonas como migrantes».

El desbroce se ha realizado desde el puente de la AP-7 hasta la desembocadura, a lo largo de más de tres kilómetros. Además, el Consistorio proyecta en un futuro crear una gran vía verde en su cauce.