Compromís ha trasladado este lunes a la Sindicatura de Greuges una queja por la negativa del equipo de gobierno de Busot a ceder un espacio público a las regidoras de la coalición para realizar una charla abierta contra la violencia machista. La formación arremete contra el alcalde y vicepresidente de la Diputación, Alejandro Morant, por no permitir el encuentro, enmarcado en la semana internacional de la violencia de género el 25 de noviembre. Critican que se les denegó la licencia alegando «que se trata de un acto político» y que va contra la Constitución que aboga por el pluralismo político.

La portavoz de Compromís per Busot, Alícia Climent, ha denunciado al Síndic lo que considera «una vulneración de los derechos fundamentales de participación pública y política en un municipio que, además , fue el único de su entorno que no realizó ningún acto institucional o lectura del manifiesto de condena propuesto por la ONU contra la violencia de género».

Climent ha recordado que la actividad se enmarcaba dentro de las actividades celebradas internacionalmente con motivo del 25N, «jornadas que no solo no deberían de ser vetadas sino promovidas por parte del consistorio en base al pacto de estado contra la violencia de género».