La actualidad refleja en ciertas ocasiones situaciones rocambolescas. Sant Joan d'Alacant cuenta con dos parcelas situadas junto al edificio de la Policía Local y del Casal de la Semana Santa, cuyo objeto es el almacenaje de enseres que los vecinos deciden depositar, ya sean muebles, diversos materiales, etc.

De la gestión y el inventario de ambas, se encarga un operario de la empresa concesionaria,FCC, que trabaja unas doce horas semanales repartidos en tres días, y que decidió, según se afirma desde el Ayuntamiento, montarse una improvisada oficina para desarrollar la faena. Esta situación se debe a que el trabajador carece de un despacho acondicionado para atender a los vecinos que acuden a este pequeño 'Ecoparque'.

Al parecer, fue el encargado de vigilar el recinto el que decidió confeccionarse una infraestructura para protegerse del calor y de la lluvia. Así lo afirmó ayer la edil de Medio Ambiente, Esther Iborra (PSOE), quién comunicó que «había sido el trabajador el que realizó la falsa caseta». Al hacerse pública la situación por redes sociales, fue el ejecutivo local el que comunicó al trabajador que debía desmontar el improvisado despacho y esperar una oficina «en condiciones».

Según pudo comprobar este periódico, ayer en el recinto, solo había una mesa con una silla azul para atender al público y se habían desmontado las lonas que hacían de paredes. Pese a existir un compromiso municipal sobre la llegada de una nueva oficina para el operario, esta situación no ha pasado desapercibida para sindicatos y oposición. Desde ambos sectores se considera que la máxima responsabilidad de lo que ocurre en la parcela es del Ayuntamiento; que consiente que haya un trabajador doce horas a la semana sin un techo y, cuando éste decide intentar mejorar sus condiciones, le dejan sin sombra y sin resguardo. «El gobierno municipal bipartito, PSOE y Cs, que promete mejoras salariales y predica los derechos laborales, tendrá que explicar cómo puede consentir que la administración tenga trabajadores en esas condiciones» afirman desde el Partido Popular. Un discurso similar vierten desde Compromís. La formación nacionalista sostiene que «un ecoparque debería dar un servicio digno, y contar con instalaciones adecuadas».

Mientras, el sindicato UGT califica de escenario «tercermundista» la situación de este trabajador e insta al Ayuntamiento a tomar medidas. Desde la concejalía de Medio Ambiente explican que se encuentran ultimando los preparativos y el presupuesto para que el operario disponga de una oficia dotada de luz y agua para ejercer su función.