Agentes de la Guardia Civil han detenido a una veintena de personas por estar presuntamente relacionadas con la ocupación ilegal de un edificio en la localidad de Mutxamel, en el que almacenaban un total de 258 plantas de marihuana. La Benemérita ha realizado varias redadas en lo que va de mes en el inmueble y esta semana ha confirmado el arresto de un total de 20 okupas acusados de los delitos de pertenencia a grupo criminal, contra la salud pública, ocupación de vivienda, defraudación de fluido eléctrico, defraudación de agua, daños al inmueble y tenencia ilícita de armas.
El caso se descubrió a raíz de un incendio originado en una de las casas del inmueble que alertó a los vecinos y al Consorcio Provincial de Bomberos. Los propios efectivos detallaron que el fuego se había originado por un cortocircuito debido a una sobrecarga eléctrica, hecho que desveló que los arrestados estaban enganchados ilegalmente a los suministros de agua y luz.
Tras el desalojo del edificio y varias inspecciones, los agentes requisaron en una primera instancia 179 plantas de marihuana, una pistola de fuego real dispuesta para uso inmediato con dos cargadores y 6 cartuchos. Por parte de la empresa de suministro eléctrico, se procedió de manera inmediata al corte del servicio, puesto que la situación ilegal suponía un gran peligro, además del estado precario en el que se encontraban dichas instalaciones en las viviendas.
Más adelante, la Guardia Civil descubrió que los okupas poseían más plantaciones escondidas por el resto de pisos y que se habían enganchado de nuevo a la red con tres cables gruesos. Por ello, los agentes realizaron otra inspección, durante la cual confirmaron el nuevo fraude en la casa, donde además vivían 6 familias con varios menores y bebés. Por último, esta semana y ante una situación similar, un nuevo registro se saldó con 4 detenciones y un total de 258 plantas requisadas.
Inseguridad
Esta situación ha provocado una gran alarma social entre los vecinos por un creciente problema de seguridad ciudadana que se estaba comenzando a producir alrededor de este bloque de pisos, como es la presencia constante de drogodependientes, pases de droga, peleas y riñas, habiendo tenido que acudir los efectivos policiales centenares de veces, para atender avisos relativos al inmueble desde el año 2015, fecha en la que fue ocupado ilegalmente, según la Benemérita.
Los agentes investigadores de la Guardia Civil han reiterado a la Autoridad Judicial su solicitud de desalojo de la totalidad de las viviendas ilegales del edificio, dado tanto al grave peligro sufrido en la zona debido a este incendio, como a las pésimas condiciones de salubridad de los moradores de los pisos okupados, sobre todo en lo que respecta a los menores. Los implicados son españoles y todos reincidentes. Diez hombres de entre 24 y 61 años y 10 mujeres, de entre 18 y 70 años.
