El pleno municipal celebrado ayer en el Ayuntamiento de El Campello aprobó por unanimidad comenzar la elaboración de un plan de actuación municipal antirriadas. La moción presentada por la formación Esquerra Unida salió adelante con el voto favorable de todos los grupos políticos. Al respecto, el edil y portavoz de la agrupación, Pedro Mario Pardo, expuso que la localidad continuaba sin un plan específico que combatiese el riesgo de inundaciones «tal y como exigía la Ley». «Desde EU llevábamos varios años exigiendo al Ayuntamiento que pusiera en marcha este proyecto, además de que invirtiera en la mejora de las infraestructuras del saneamiento municipal, así como en la limpieza de todos nuestros barrancos», puntualizaba Pardo durante la sesión.

Añadía el concejal de izquierdas que insistía en la necesidad de contar con este plan dado que el objetivo era el de «evitar las obstrucciones de agua a su salida al mar». Los últimos episodios de gota fría en la provincia han provocado que los municipios alicantinos comiencen a trabajar en todas la labores de prevención y cuidado sobre posibles riadas e inundaciones locales.

Asimismo, destacaba Pardo que desde la Dirección General de Seguridad y Emergencias de la Comunidad Valenciana resaltaron que «un total de 136 municipios deberían tener elaborado un programa de actuación municipal», mientras que a día de hoy solo 33 localidades cuentan con este requisito. Sobre dicho asunto, desde EU valoraron que este primer paso, adoptado por unanimidad de todos los grupos, «expresa una voluntad para abordar esta problemática y eso es una buena noticia, no cabe duda». La formación también pone el foco en el cuidado periódico de todas las ramblas, cauces y barrancos de El Campello, puesto que un informe redactado por técnicos municipales señala que hasta seis cuentan con serio peligro de inundación.

El primer edil de la localidad, Juanjo Berenguer (PP), valoraba positivamente la puesta en marcha de la redacción de dicho plan y subrayaba que el equipo de gobierno se centrará en la elaboración de un plan de emergencias municipal, algo que el alcalde tildaba también de «necesario».

Por otro lado, Esquerra Unida también manifestó que el tripartito debe ponerse a trabajar en la mejora del alcantarillado, puesto que la gran mayoría presentan un aspecto «obsoleto», especialmente la zona norte del municipio, donde es inexistente, a pesar de tratarse de zonas urbanas. En otro orden de asuntos, la cuestión urbanística también copó parte del debate político en el pleno municipal. El foco se puso sobre la construcción «totalmente descontrolada» en la localidad, que ha generado «auténticos destrozos medioambientales y casas que en la actualidad pueden encontrarse en un riesgo de desaparición», por el descontrol en las licencias de obras locales.