Los festeros de Mutxamel recordarán siempre este año de celebraciones de Moros y Cristianos. Además de las fuertes lluvias que han sido protagonistas durante la mayoría de los días de festejos locales, esta edición dejó ayer una imagen para la historia, como fue la celebración de la Embajada Cristiana en el interior de la Iglesia Parroquial de El Salvador. Los propio festeros resaltaban que nunca se había dado tal situación. Incluso los veteranos y veteranas hacían un ejercicio de memoria y les costaba recordar algo similar. El municipio despidió ayer el año festero con una estampa única, como fue la del altar acogiendo el momento durante el cuál las tropas cristianas recuperaban el castillo y se lo arrebataban a las huestes mahometanas.

Bajo techo Santo, todas las Comparsas se dieron cita en el edificio religioso para disfrutar de los últimos instantes de las Fiestas 2019. Vecinos, curiosos y autoridades festeras se unieron para plasmar este recuerdo que quedará en las retinas de muchos. Después del parlamento, entre ovaciones y máxima expectación, se produjo la entrega de banderas de ambos bandos.

Fue un día duro para los comparsistas. Hasta el momento, las lluvias habían dado cierta tregua a los festeros durante la celebración de sus días grandes. Los eventos previstos para el lunes y martes pasado pudieron salir adelante. La Ofrenda y la Gran Entrada marcaban un genial inicio de los festejos locales. Sin embargo, el miércoles y jueves la situación empeoró. El 11 de septiembre, el municipio pudo disfrutar de la primera Guerrilla y de la Embajada Mora, aunque fuera por la tarde debido a un aguacero. Pero las fuertes precipitaciones recogidas ayer en toda la provincia impidieron de cualquier manera la celebración de la segunda Guerrilla, la tradicional Embajada Mora y del Desfile nocturno de todas las Comparsas.

Sin embargo, los arcabuceros tendrán que solucionar, a través de la Comisión de Fiestas, la problemática ocasionada a raíz de la cantidad de pólvora que se quedó sin usar ayer. Los propios tiradores ni pudieron recoger el segundo cargamento de 200 kilos por la situación meteorológica, y ahora deben negociar con la suministradora si recuperan el dinero del pedido. Desde la misma Comisión aseguraban ayer que intervendrán para que las pérdidas económicas no se acentúen, aunque podrían superar los 100 euros por festero. Hoy los festeros descansarán en sus barracas por el día de los Borrachos, hasta el próximo año.

Las Fiestas de Mutxamel no han sido las únicas afectadas por el temporal de gota fría que ha azotado estos días al territorio alicantino. La localidad vecina de Sant Joan d' Alacant también se vio obligada a suspender los eventos de la primera noche de festejos en honor al Cristo de la Paz, y a última hora de la tarde, el Ayuntamiento confirmaba que los actos de esta mañana también se cancelarían si no había una mejora «importante» de la previsión y del tiempo. Los de la tarde de hoy están pendientes de celebrarse.