El Ayuntamiento de San Vicente del Raspeig todavía tiene que conformar el equipo que gestionará las concejalías. El viernes tuvo lugar el pleno de constitución del Ayuntamiento, ya hay 25 concejales en el consistorio, pero está por designar quien dirigirá cada una de las áreas de gobierno. El alcalde, Jesús Villar, centraliza toda la gestión del Ayuntamiento mientras los empleados municipales siguen su actividad a la espera de ver quién les dirigirá.
Y ello depende de que haya un acuerdo entre el PSOE, la fuerza mayoritaria con 10 concejales, y Esquerra Unida, con dos. EU mantendrá una reunión hoy los socialistas, ya ha habido dos en las dos últimas semanas y esta no será la última. Los partidos tienen que llegar a un acuerdo de gobierno y limar aquello en lo que hay diferencias. La pelota de los pactos está en el tejado de EU que hasta que se decida no dará pie a la asignación de las concejalías.
El alcalde, de quien dependen, reconocía ayer su interés de que sea cuanto antes para poder comenzar a trabajar. Sin embargo, Villar ya no cree probable que sea el viernes y augura que habrá que esperar hasta el lunes, ya que tras las reuniones con EU, la formación tiene que convocar a su asamblea que será la que decida si finalmente hay coalición de gobierno.
La semana pasada sorprendía la decisión de Compromís, socio de gobierno en los últimos cuatro años del PSOE, cuyos militantes votaron por unanimidad no formar parte del gobierno municipal.
Entre EU y PSOE la sintonía es buena y la predisposición de ambos partidos a seguir trabajando juntos también.
Por su parte, el grupo municipal socialista se reunía ayer por la tarde para perfilar su propuesta al pleno organizativo que está previsto para el 24 de julio. El PSOE ha hecho una primera ronda con todos los grupos políticos para conocer cuáles son sus demandas y ahora falta definir las suyas, entras las que también se va a barajar si se aspira a una subida de sueldo, así como sus pretensiones de personal de confianza. Les corresponden 4, los mismos que en los últimos años.
Los dos grupos de la oposición más numerosos, Cs y PP, coinciden en solicitar que se cumpla lo establecido por el Reglamento Orgánico ROM que les asigna dos cargos de confianza a cada uno. De una posible subida de sueldos, el portavoz de Cs, Pachi Pascual, señala que su grupo no la ha solicitado pero «si alguien la plantea dentro de una negociación global la estudiaremos».
Mientras, los despachos de la segunda y tercera planta del Ayuntamiento donde los grupos políticos y los concejales ocupan sus espacios estuvieran ayer cerrados. En algunas puertas aún cuelgan los nombres de concejales que ya han dejado de serlo. Está pendiente también el reparto de despachos. Los grupos han manifestado su intención de seguir en el que tenían, aunque Ciudadanos, que es la fuerza de la oposición más numerosa con cinco ediles, tiene que ocupar uno más amplio que el actual, que en principio se le asigna a los dos de Vox, que es nueva.
