La Policía Local de San Vicente del Raspeig cuenta con armas eléctricas, útiles para reducir a una persona a la que paralizan con la descarga eléctrica que producen. Y para instruirse en su manejo, un total de 20 policías locales, a través del Área de Formación de la concejalía de Seguridad, se han instruido en el uso de los Dispositivos Electrónicos de Control (DEC), conocidos popularmente como pistolas Taser.

Se trata de unas armas que permiten paralizar al sujeto al que apuntan. Aprender a usarlas correctamente es fundamental puesto que provocan una descarga que en caso de un mal uso o desproporcionado podrían, en los casos más extremos, provocar la muerte de la persona que la recibe.

Las jornadas formativas en las que han participado los policías se han dividido en dos sesiones, una teórica y otra práctica de 18 horas de duración

Esta formación es especialmente importante para el buen manejo de estas armas, de ahí que los policías han recibido la instrucción sobre aspectos tácticos y técnicos del uso de las pistolas eléctricas. También sobre los protocolos a seguir ante la presencia de sujetos que por el estado en el que se encuentran podrían sufrir algún colapso ante situaciones estresantes como las que se puede generar en una detención policial, bien porque presenten cuadros violentos de «delirium agitado» o «delirium tremens». El objetivo que persigue la formación es aprender a distinguir estas situaciones y prevenir que se pueda producir una muerte.

Desde la Jefatura ponen el énfasis en la importancia de realizar este curso formativo que permite tener «policías más formados y capacitados para evaluar y afrontar situaciones ante sujetos violentos». También que los agentes adquieren los conocimientos tácticos en el uso de estas armas eléctricas.

Comprobar su efecto

Para comprobar el alcance y efectividad de estas pistolas Taser, los propios policías sanvicenteros se sometieron de forma voluntaria a una descarga completa de dichos dispositivos «con el fin de ser plenamente conscientes y comprender mejor los efectos de incapacitación de los DEC, ganar confianza, perder el miedo a su uso, así como comprender por lo que está pasando el sujeto que está siendo controlado o detenido mediante este dispositivo», destacan los mandos policiales.

Estos dispositivos están diseñados para no ser letales e incapacitar de forma temporal y reversible. Se utilizan por las policías locales de más de 200 municipios de toda España. Su principal misión es la de evitar el uso del arma de fuego minimizando los riesgos de causar lesiones graves al sujeto al que deben de detener.

La Policía Local de San Vicente se forma en esta materia desde el año 2015. En la actualidad dispone de dos pistolas Taser que ya han sido utilizadas. Los agentes lograron reducir con su uso a una persona que estaba apuñalando a otra. «Se consiguió detener al agresor que esgrimía en su mano un gran cuchillo, sin lesión alguna para el detenido», advierten desde la jefatura policial.

Los policías que han recibido la formación pertenecen a la plantilla de San Vicente y a la de Altea, por un acuerdo de colaboración entre Jefaturas. Y han recibido formación sobre otras materias como el uso de la fuerza policial.

La formación de los agentes en San Vicente es continua y el municipio también ha acogido a medio centenar de policías locales de toda la provincia que se han instruido sobre los aspectos a tener en cuenta a la hora de proceder a la identificación, búsqueda y recuperación de vehículos robados.

Los policías se instruyen en el análisis de los elementos de identificación de los vehículos para conseguir detectar las manipulaciones.

Para ello en la formación se abordan aspectos relacionados con los permisos de circulación, permisos temporales, actuaciones ante vehículos extranjeros, infracciones por carecer del seguro obligatorio, así como las medidas provisionales de inmovilización de vehículos y depósitos.

Falta evidente de agentes

«Es evidente, y así lo hemos dicho en muchas ocasiones, que la plantilla de la Policía Local es insuficiente para atender a una población que ha crecido tanto como la nuestra», destaca la concejala de Seguridad, Maribel Martínez. «Las limitaciones de contratación, desde el Gobierno Central, nos han impedido tener el número de agentes que precisa esta ciudad; pero sí debo resaltar la enorme profesionalidad de los agentes de los que disponemos, la voluntad de éstos por formarse y el esfuerzo de la Jefatura y del Ayuntamiento para que nuestros agentes desempeñen su trabajo de la mejor forma posible», destaca la edil quien junto al Comisario Jefe, Juan Mariano Jiménez, ha asistido a la inauguración y al cierre de esta formación policial.