La bajada del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) en Sant Joan d'Alacant ha quedado aparcada. El pleno ordinario del mes de noviembre celebrado ayer no llegó a aprobar el punto que presentaba el equipo de gobierno de manera urgente. La oposición, PP, Compromís y el concejal no adscrito, Ignacio Gisbert votaron en contra de incluir la urgencia en la sesión plenaria.

El alcalde, Jaime Albero, aseguró ayer que la baja del IBI es un objetivo de su gobierno y que las cuentas saneadas permiten llevar a cabo esta rebaja, por lo que la semana que viene asegura, se convocará un pleno extraordinario para debatir la posibilidad de una rebaja del impuesto.

El asunto conlleva polémica. puesto que el equipo de gobierno por su lado, defiende que dicho punto debía salir adelante, mientras que la oposición justifica su postura advirtiendo que es inviable dicha bajada. Los populares señalan que "la demora del tripartito y la desidia del concejal de Hacienda, que ha tardado un mes en solicitar los informes técnicos, hace inviable una baja de impuestos en 2019", declara el portavoz del PP, Manuel Aracil.

Apunta que el Interventor municipal advierte que para reducir el tipo de gravamen del IBI, que en Sant Joan es uno de los más altos de la comarca, "se debe de modificar la ordenanza fiscal", añade. Aracil expone que el procedimineto debe de estar concluido antes del 1 de enero de 2019 "y el informe constata de que no hay tiempo matarial para llevar a cabo los trámites necesarios establecidos por la legislación".

Por su parte, el equipo de gobierno lamenta que la oposición se haya opuesto a pesar de una enmienda realizada por PSOE proponiendo el cambio de fecha en la propuesta si esta no era aplicable por los plazos de exposición al público para que la bajada pudiera hacerse efectiva en 2020.

Por su parte, el concejal de Hacienda, Santiago Román, arremete contra la oposición y explica que "en 2014 la propuesta del PP para modificar la ordenanza a las familias numerosas se aprobó un 24 de noviembre, es decir, en las mismas fechas que la modificación actual. Decir que no estamos en plazo es una irresponsabilidad cuando él conoce perfectamente que en 2014 así se hizo", decía refiríendose al portavoz popular.

Román también critica que el grupo popular "quiere bajar el IBI un 5% y no un 10% como proponemos desde la concejalía". Tanto el concejal de Hacienda como el alcalde defienden que las cuentas de Sant Joan están saneadas y se pueden permitir dicha bajada del IBI. "Hoy, con la deuda financiera situada en 6.700.000 y con los deberes hechos, podemos bajar el IBI pero la irresponsabilidad de PP, Compromís y el tránsfuga lo han impedido".

El concejal señala que ya ha pedido al alcalde un Pleno extraordinario para volver a llevar su propuesta a debate y pidió a quienes han obstaculizado esta rebaja fiscal que recapaciten y miren por los intereses de todos los ciudadanos y no únicamente por intereses electoralistas. El alcalde asegura que la semana que viene se va a volver a presentar la rebaja del IBI en un pleno extraordinario.

Por su lado, Ciudadanos señala que "si existe la mínima oportunidad de bajar los impuestos de manera coherente estaremos a favor, porque consideramos que los vecinos deben de verse aliviados en el pago de impuestos". A la vez que piden "coherencia y reflexión" a todos aquellos grupos municipales que votaron que no.

En el voto negativo está Compromís, que justifica su decisión señalando que el concejal de Hacienda "no ha realizado una propuesta viable en tiempo para una bajada para 2019 y así lo afirma el informe jurídico del secretario". El concejal, Sergio Agueitos, explica que es "algo reconocido por el PSOE que ha intentado salir del paso con una enmienda para que pasara a aprobarse en 2020.

Es por este motivo por lo que simplemente hemos emplazado al concejal a aprobar una bajada del IBI consensuada y bien trabajada junto a otros impuestos. Por tanto, el debate no sólo es ficticio, sino que este gobierno está alimentando una polémica para justificar su dejadez y tapar que ni siquiera ha sido capaz de presentar unos presupuestos para 2018".

Además de la polémica por no poder debatir una rebaja del IBI, también funcionarios municipales protagonizaron una protesta en el pleno para exigir la reclasificación laboral de los funcionarios que menos cobran en el consistorio o el aumento de la plantilla de la Policía Local.

El concejal de Personal, Antoni Manel Giner, explica que el conflicto no es nuevo y reconoce que las negociaciones con el equipo de gobierno se remontan al año 2016. Explica que las reivindicaciones se están canalizando y de hecho, afirma que el viernes hay una mesa general de negociación con la Policía Local para tratar las propuestas que han presentado al Ayuntamiento.

El edil reconoce su sorpresa por la protesta ante el pleno del lunes y señala que los sindicatos "ya sabían que estaba en marcha la mesa". Achaca esta propuesta a que "el 28 de diciembre hay elecciones sindicales".