La Policía Local de Mutxamel ha abierto más de una veintena de expedientes sancionadores,quince de los cuales ya han acabado en multa, tanto a empresas como particulares que no hacen un uso correcto del sistema de gestión de podas ofrecido por el consistorio. El alcalde, Sebastián Cañadas, explicó ayer que el Ayuntamiento «no ha tomado esta decisión por afán recaudatorio, sino por mejorar la imagen del municipio después de haber implantado un servicio de recogida de podas puerta a puerta y se haber hecho muchas campañas de información y concienciación que no ha tenido efecto suficiente».

Las sanciones, que se consideran leves, tiene un importe entre 200 y 400 euros. La brigada de urbanizaciones recuperada por el gobierno local en agosto es la primera que detecta estas infracciones, patrullando en turnos por los diferentes núcleos residenciales, aunque Cañadas -que también ejerce de concejal de Seguridad- indica que la colaboración ciudadana es muy importante y «son los propios vecinos que ven un mal comportamiento los que pueden llamar a la Policía Local».

El alcalde asegura que está constatado que en varias ocasiones, como consta en los expedientes sancionadores, son los propios vecinos de Río Park, la Huerta o Las Paulinas «los que descubrimos tirando poda donde no deben, en contenedores que están muy cerca de sus casas».

Además, Cañadas incide en que un particular «puede tirar al contenedor una bolsa pequeña con restos de césped cortado o con hojas pequeñas, pero no puede tirar ramas de palmera. Para eso se va a ecoparque o se llama a la empresa que lo recoge en tu casa de forma gratuita», añade.