La esperada visita de los técnicos de la Conselleria de Cultura a los azudes de Mutxamel y Sant Joan, requisito imprescindible para que estos vestigios de la arquitectura hidráulica del río Monnegre sean declarados Bien de Interés Cultural, ya se ha producido. Hace un par de semanas, tres responsables de la Dirección General de Patrimonio conocieron de primera mano las características de esos dos enclaves, acompañados por un representantes del Canal de la Huerta de Alicante, la cronista oficial de Mutxamel, Asunción Brotons, técnicos del Ayuntamiento y el concejal de Cultura de Mutxamel, Rafael García. Este «trabajo de campo» sirvió para «confirmar el valor monumental y conocer la ruta de los «Camins de l'Aigua» que se están creando en torno a los valores patrimoniales que ofrecen estos elementos históricos».

El edil del PP también aseguró que el próximo paso es recibir «un borrador de redacción, que enviará la Conselleria, con las especificaciones necesarias para incoar el expediente de reconocimiento del BIC». Aunque los azudes no se protejan de forma automática, una vez que el expediente ya esté abierto, ya se pueden pedir ayudas para realizar obras de restauración que permitan recuperar estos hitos de los sistemas tradicionales de riego.

En cualquier caso, ya está en proceso de adjudicación una obra de 200.000 euros, financiada por la Diputación Provincial, para reformar la casa de compuertas y la vivienda del azutero de Les Fontetes, construido en el siglo XIII.