La obra hace dos meses que debía de haber culminado, pero no ha habido movimiento durante los tres meses que estaba previsto que iba a necesitar para desarrollarla. Han pasado cinco meses y el Ayuntamiento de San Vicente del Raspeig no ha tenido señales de vida de una mercantil y es ahora cuando le requiere para que acuda a formalizar el acto que permite comenzar los trabajos.

El contrato es el de las obras de adecuación de locales en planta baja del ayuntamiento para dependencias municipales. Se adjudicó el 17 de enero pasado a la mercantil Deicomur por 144.676 euros al tratarse de la oferta económica más ventajosa entre las seis propuestas recibidas por el Ayuntamiento.

Un informe de Arquitectura subraya la imposibilidad de iniciar las obras. Y se detalla que se han hecho intentos por contactar con el contratista a través de correo electrónico, teléfono y burofax.

El alcalde, Jesús Villar, ha firmado un decreto en el que indica que ha incumplido los plazos y hace un requerimiento para que se persone e inicie la obra. En caso contrario anuncia que se iniciará la resolución del contrato que lleva consigo la incautación de la garantía depositada por la empresa, casi 6.000 euros, y se exigirá además una indemnización por daños y perjuicios.