El concejal de Cultura y Fiestas, Pere Lluís Gomis (PSOE), salió al paso ayer del informe de la interventora municipal de El Campello, que alerta de supuestas irregularidades en las subvenciones de 2016 a entidades como la Junta Festera, la Associació l'Avanç y la Cofradía de Pescadores, y anunció que ya trabajan en actualizar los documentos para adaptarlos a la Ley. Y al mismo tiempo descargó de responsabilidades a las asociaciones afectadas.

Gomis, concejal de las áreas de Cultura y Fiestas desde finales de 2016, explicó a este medio ayer que «las asociaciones no son responsables de las conclusiones de este informe, ya que los convenios tienen más de 20 años de antigüedad. Es posible que a día de hoy, con la legislación vigente ahora, no estén actualizados. Este es el primer informe de la historia que dice que hay que revisar los convenios. Así que el equipo de gobierno está trabajando para que estos convenios se adapten a los nuevos tiempos».

El informe de la interventora municipal alerta de supuestas irregularidades, ya que considera que hay facturas que no están debidamente justificadas y que las condiciones que se establecen en algunos convenios exceden el marco legal y podrían llegar a considerarse un contrato de servicio, como es el caso del de la Junta Festera. Por ello insta a la Corporación a pedir el reintegro de 51.750 de los 98.000 euros concedidos a la Junta, de 7.160 de los 14.000 de l'Avanç y 5.282 euros de los 11.000 de la Cofradía de Pescadores.

Ante esta situación el alcalde ya explicó el viernes que estudian cómo evitar tener que efectuar el reintegro, ya que temen también que las ayudas de 2017 también estén afectadas por las mismas deficiencias. Y también descargó a las asociaciones de responsabilidades.