Poco más de dos años ha durado el cuatripartito de Sant Joan d'Alacant en el gobierno. El miércoles por la noche, el portavoz de Compromís, Llorenç Román, anunció en el pleno que los tres concejales de la formación abandonaban el equipo de gobierno al estar en desacuerdo con la gestión del alcalde, el socialista Jaime Albero, y con las formas de proceder de éste. Las discrepancias entre estos dos partidos han sido continuas en lo que va de legislatura, pero la gota que colmó el vaso fueron las cuentas municipales de 2017, que Albero modificó para incluir una inyección de 50.000 euros para la empresa que gestiona el servicio de recogida de basura y limpieza viaria, una mercantil que recibe más de un millón y medio de euros al año por dicha contrata.

Así, el cuatripartito de Sant Joan ha pasado a mejor vida. Ayer, los ediles de Compromís (Llorenç Román, Sergio Agueitos y Alba Lledó) presentaron su renuncia oficial a través de un escrito en el que arremeten contra el alcalde y exponen los argumentos que les han llevado a tomar la decisión de dejar sus competencias a mitad de la presente legislatura. «Llevamos prácticamente desde los inicios sufriendo el talante autoritario y déspota del señor alcalde. En las divergencias nunca ha optado por el diálogo, sino por la confrontación, por hacer uso de su posición, por la política para presionar, huir del debate, manipular y jugar a agotar los tiempos con opacidad y política de hechos consumados», explicaron desde la formación de izquierdas.

En concreto, Compromís describe al primer edil del Partido Socialista como una «figura intransigente y sin criterio», como «una persona obsesionada por el control del poder», «déspota» e «incapaz de liderar cualquier proyecto». Asimismo, los ediles acusan a Albero de apropiarse de sus competencias, de dar órdenes contradictorias a lo funcionarios, de desautorizar su trabajo públicamente y de boicotear actos organizados por las áreas que, hasta ayer, dirigían.

Los tres concejales, que ya forman parte de la oposición, destacaron el «autoritarismo» de Jaime Albero. Así, en el escrito manifestaron que «la sumisión al alcalde sin matices ha sido la única opción encima de la mesa para los socios de este gobierno».

Por su parte, el concejal Sergio Agueitos también destacó el carácter cambiante del primer edil de Sant Joan. Según Agueitos, «es complicado obedecer ocurrencias» porque «Jaime cada día piensa una cosa diferente, cada día se despierta queriendo dedicar un edificio a cosas diferentes, no tiene unos objetivos claros».

El ya ex edil de Hacienda considera que todas estas dinámicas son «perjudiciales para el buen funcionamiento de un gobierno plural». «Hemos tomado una decisión coherente. Todo tiene sus límites y no podíamos seguir dándole una mayoría a un alcalde que nos ningunea y al que le importa muy poco el pueblo de Sant Joan».

Gobierno en minoría

Una de las principales consecuencias del abandono del equipo de gobierno por parte de Compromís es la situación en la que queda en tripartito que, con sólo nueve concejales, tendrá que gobernar en minoría y buscando el apoyo de la oposición para poder sacar adelante su gestión y sus propuestas.

Tras la salida de los tres ediles de Compromís, el tripartito de Sant Joan queda conformado por los cinco regidores del Partido Socialista, los dos de Esquerra Unida y los dos del grupo Decido. La bancada de la oposición la ocupan doce concejales: siete del Partido Popular, uno de Ciudadanos, el edil tránsfuga Natxo Gisbert y los tres de Compromís.

Reacciones

La decisión de Compromís de abandonar el equipo de gobierno pilló por sorpresa al alcalde de Sant Joan, Jaime Albero, que considera que sus ex socios han utilizado «un lenguaje muy agresivo», «piensan en las elecciones de mayo de 2019» y que han actuado «por estrategia política». «Siempre hemos estado abiertos a negociaciones y ahora tendremos que dialogar como siempre lo hemos hecho. Seguro que ahora las áreas van a funcionar mucho mejor».

Esta opinión la suscribe casi al dedillo el portavoz del grupo Decido, Santi Román, que calcó las palabras de Albero: «Se han preocupado por las elecciones de 2019». Sin embargo, Román aseguró que se esperaba la salida de Compromís, ya que considera que «han estado forzando la máquina», «que han estado muy influenciado por su partido» y que «estaban buscando la ruptura».

Por su parte, la portavoz de EU, Clara Rodríguez, tampoco se mostró sorprendida por la decisión de sus ex compañeros y se posicionó cerca de Compromís en lo referente a la falta de diálogo dentro del equipo de gobierno. «Los constantes rifirrafes afectaron a la comunicación pero, a pesar de las desavenencias, nosotros siempre intentamos que se arreglen de manera interna», declaró Rodríguez.

En cuanto al grupo mayoritario de la oposición, el Partido Popular calificó de «bochornoso» el conflicto del equipo de gobierno y «la falta total de moderación, diálogo y ausencia de cintura política del señor alcalde».