Son las 15.00 horas del pasado miércoles y Félix Palomares atiende una mesa de su heladería Miramar, junto al paseo del Carrerlamar de El Campello, cuando escucha la llamada de socorro de dos niños que no pueden alcanzar la orilla. No lo duda, se quita las zapatillas y la camiseta, y se mete en el agua con una pequeña tabla de surf. Minutos después, los dos niños de 12 años y sus padres están a salvo tras un susto tremendo que jamás olvidarán. Era el último día sin servicio de salvamento en las playas del municipio -empezaron el jueves 1 de junio-, pero este hostelero campellero hizo a la perfección de socorrista.

Palomares explicaba ayer que era la primera vez que rescataba a alguien del agua, y que por supuesto lo volvería a hacer. «Estaba atendiendo a unos clientes en la terraza de mi heladería y escuche que dos niños pedían auxilio. Gritaban 'socorro'. Se trataba de dos chavales de 12 años de Albacete, que aprovechando que allí era día festivo habían venido con sus padres a la playa. Llevaban todo el día en la playa nadando, y debían de estar muy cansados. Durante toda la mañana el mar había sido una piscina, en calma, pero empezó a soplar el levante y el mar se puso muy feo y les sorprendió, ya muy agotados. Cuando entra el levante el mar se pone muy peligroso».

Palomares, de 41 años y aficionado a todo tipo de deportes, recuerda que «al oir que gritaban socorro no lo dude. Dejé la bandeja, me quité las zapatillas y la camiseta, cogí por el camino una tabla de body con la que poder ayudarles y me tiré al agua. Al primer niño, que sabía nadar un poco mejor, le dejé la tabla y me fui a por el otro, que estaba más fastidiado. Le dije que se tranquilizara y que me usará de flotador. No se puso nervioso y pudimos salir del agua. Quería vomitar y le dije que lo hiciera. Al final los dos salieron ilesos pero fue un buen susto. No lo olvidarán».

Este hostelero es aficionado a todo tipo de deportes, entrena con la Agrupació de Veterans El Campello y es un apasionado del windsurf. Precisamente «mi afición por el windsurf me fue de mucha ayuda, ya que sé manejarme y aprovechar las corrientes para entrar y salir del agua, lo que me facilitó el rescate de los dos niños». Y recordó que algún panel informativo en las playas explicando cómo actuar frente a las corrientes podría evitar este tipo de incidentes que pueden acabar en desgracias.

Su heroicidad fue agradecida por los padres de los niños, que también se lanzaron al agua pero a punto estuvieron de no contarlo, ya que no podían llegar hasta ellos. Uno de los progenitores, José Ródenas Belmonte, explicó en el Facebook de la heladería que «de no haber sido por Félix hubiésemos muerto ahogados tanto mi hijo como yo intentando rescatarlo».

Además, el martes un socorrista fuera de servicio salvó a otras dos bañistas en apuros en la playa de Muchavista.