El trágico y oscuro pasado del Preventorio de Aigües atrae a decenas de jóvenes intrépidos que, año tras año, aprovechan la festividad de Todos los Santos para hacer una tétrica visita en busca de espíritus a esta antigua residencia de tuberculosostétrica visita , donde se registraron varias muertes. Este lugar se ha convertido en una atracción cada 1 de noviembre pese a representar un grave peligro a sus visitantes debido al mal estado de la construcción. Por ello, el alcalde del municipio, el socialista Mario Calvo, ha decidido reforzar en esta ocasión la seguridad en la zona para evitar cualquier tipo de incidente.
«El Preventorio es un tema que nos preocupa. Tan solo tenemos un agente en la Policía Local y por eso hemos solicitado refuerzo para este fin de semana sabiendo lo que suscita este lugar», explicó ayer el primer edil socialista. Así, este noche se ha habilitado un operativo especial de seguridad en este punto de Aigües.
De esta forma, el nuevo alférez de la Guardia Civil de El Campello, tras mantener conversaciones con Calvo, ha considerado apropiado habilitar una patrulla nocturna especial para vigilar la zona. Asimismo, la Policía de El Campello controlará el acceso al municipio en el punto que linda con su localidad para «hacer un primer filtro», indicó ayer el alcalde. También el único agente local con el que cuenta Aigües hará guardia durante toda la noche a las puertas de lo que a principios de siglo fue un balneario y que durante el franquismo se convirtió en una residencia de tuberculosos.
