El futuro desarrollo urbanístico de San Vicente del Raspeig pasa por los desarrollos de los planes urbanísticos Castellet-Montoyos que debía de haber comenzado hace dos años. El equipo de gobierno cuatripartito en el Ayuntamiento lleva hoy a aprobación una prórroga para no comenzar las obras y esperar otros dos años. La crisis económica y el parón del desarrollo inmobiliario que la empresa que debía desarrollarlos esgrimió en 2013 para no iniciar el desarrollo son los mismos argumentos que la mercantil Urbedesa utiliza de nuevo para pedir una prórroga de suspensión. «El sector Castellet-Montoyos es muy importante por su situación limítrofe con la Universidad, porque queremos engullirla en nuestra trama urbana», explica la concejal de Urbanismo, Mariló Jordá.
Los planteamientos del actual cuatripartito para permitir esta prórroga se amparan en la importancia que van a tener estos planes en el desarrollo económico y social de San Vicente del Raspeig en el futuro. Es la zona de futura expansión en terrenos situados entre la Universidad y los Juzgados. Reconocen la actual situación de paralización de la construcción pero confían que vuelva a reactivarse.
Son los mismos argumentos que el PP utilizó para permitir la prórroga en 2013. «El PRI Castellet-Montoyos será uno de los espacios urbanos que va a experimentar un desarrollo más inmediato cuando se supere la fase de crisis económica e hipotecaria, por su situación cercana al centro urbano, al campus universitario y a las comunicaciones por carretera, autovía y tren de cercanías», exponía Antonio Carbonell en 2013.
Justificación
Ahora, el portavoz del grupo socialista, Manuel Martínez, admite que van a ser favorables a la prórroga pese a que en 2013 votaron en contra. Una crítica que hace el grupo popular que denuncia dicho cambio. Para dar el voto favorable «hemos estudiado alegaciones, informes técnicos, la base legal y la situación urbanística en la que se encuentran todos los planes urbanísticos de San Vicente».
El portavoz socialista señala que son una reactivación de la actividad en San Vicente y que «ahora mismo Castellet y Montoyos son los dos únicos planes viables,». Y justifica que, pedir la caducidad de la licencia habría significado «dejar otra zona más de desarrollo en el aire y la administración pública debe promover el desarrollo económico y social del municipio y esta es nuestra oportunidad, con la caducidad perdemos la oportunidad de que en dos años se genere actividad económica».
El grupo popular recuerda que la actual concejal de Urbanismo y entonces portavoz del grupo municipal de EU, solicitó en el pleno de julio de 2013 despojar a Urbedesa de la condición de urbanizador y se opuso a conceder una suspensión temporal que ahora propone.
La edil apunta que se va a aprobar la prórroga «por prudencia» y advierte que los servicios de Urbanismo también van a contemplar un nuevo escenario: «Si no se desarrolla se hará por gestión directa cambiando el planeamiento y haciendo que los costes de urbanización sean menores. No sé si la situación variará mucho».
