La fantasía y el color se adueñó ayer de las calles de Sant Joan d'Alacant en el gran desfile de carrozas que puso el colofón final a los festejos mayores de la localidad. Tras cinco días de intensas celebraciones, marcadas por la diversión y el buen tiempo, los santjoaners disfrutaron ayer de la última jornada festera en la que los peñistas recorrieron el municipio a cuatro ruedas, recreando la magia de las historias infantiles, como los miembros de Els Penjats que se disfrazaron de personajes del mítico cuento de Peter Pan y subidos en un carro que imitaba un libro abierto con el que se arrancó el multitudinario desfile, pasadas las 20.00 horas.

También los peñistas de Els Marxosos se sumaron a esta temática con un espectacular barco pirata que surcó las calles del municipio, al igual que los indios y vaqueros de Playmobil, interpretados por la peña Xiquets y Fadrins, trasladaron a los asistentes a su tierna infancia.

También hubo espacio para temáticas de lo más disparatadas. Desde la elección de la peña El Comerç, que demostró su originalidad con una carroza que recreaba un bosque donde iban camuflados los festeros hasta los trogloditas de Ens beven fins al gel, flamencas de la Feria de Abril de Ho trenquem tot y los personajes de circo con los que la peña La bufa y la gamba cerraron el desfile. El punto más desenfadado lo pusieron los miembros de La Polsegura, quienes disfrazados de «princesas y princesos» animaron a todo el público con música de lo más marchosa. Un total de 28 carrozas, de las que 19 optaban a premio, recorrieron las calles de la localidad.

Público entregado

La asistencia al último gran acto de los festejos mayores de Sant Joan fue masiva. La avenida de La Rambla, principal arteria de la localidad y por donde transcurrió el desfile en dos ocasiones, en la primera vuelta se exhiben las carrozas y en la segunda se entregan los premios, estaba a rebosar. En las terrazas de los bares, que en algunos tramos invadían casi toda la acera, tampoco habían mesas libres. Y es que muchos vecinos optaron por disfrutar del espectáculo mientras tomaban una caña y un pincho en alguno de los múltiples establecimientos que anoche también se sumaron a la fiesta. El público se entregó a los peñistas y aplaudió con ilusión a cada una de las carrozas.

Bajo la atenta mirada del jurado, compuesto por cinco miembros entre los que se encontraban el comerciante santjoaner Manuel Tejero o el secretario de la Federación de Hogueras de San Vicente, Rubén Monllor, las carrozas iban llegando al final de la primera vuelta, que concluye en la tribuna oficial. Allí también estaban los concejales del equipo de gobierno de Sant Joan, que seguían el desfile con máxima expectación y que, en algunos momentos, se dedicaron a coger al vuelo los caramelos que los más pequeños lanzaban desde las majestuosas carrozas. Los alcaldes de localidades vecinas tampoco quisieron perderse el colorido espectáculo. Así, el alcalde de San Vicente, Jesús Villar, la primera edil de Xixona, Isabel López, o el regidor de El Campello, Benjamí Soler, estuvieron presentes entre el público de la tribuna.

Premios al glamour

Al término de la segunda vuelta, el jurado desveló los nombres de las peñas premiadas otorgando el primer galardón a una de las carrozas más glamourosas de la noche, la de «Priscila, reina del desierto», en la que los peñistas de A tu res t'importa recreaban escenas del famoso musical. El segundo fue para las sofisticadas bailarinas con can can de la segunda carroza de Els marxosos mientras que los soldados de El comerç se llevaron el tercer premio. La distinción de honor fue para los peñistas de El tró, que con su particular huerto pusieron el toque comarcal al pasacalles.

Por la mañana, se hizo entrega de los premios del concurso de peñas, donde se distinguen los recintos festeros mejor decorados. Este año el primer galardón fue para Els marxosos, mientras que el segundo y tercer premio fue para las peñas Fem lo que poem y L'escola. Por otro lado, también se premió, por primera vez, al balcón mejor adornado, localizado en la calle del Mercado, 52, mientras que la calle ganadora por su decoración festera fue la de Cristo de la Paz.

A la una de la madrugada, los peñistas y vecinos de la localidad despidieron las celebraciones mayores con el espectacular castillo de fuegos, que se lanzó desde el Racó de Giner, poniendo el broche final a las fiestas.