San Vicente del Raspeig ha realizado una solicitud poco habitual. El Ayuntamiento remitió ayer a la Diputación una petición para cambiar una obra -ya aprobada y que iba a recibir una subvención- por otra. Prioriza y considera que es mucho más importante ejecutar mejoras en el pabellón polideportivo del municipio que la prevista, que era el proyecto de accesibilidad peatonal en la calle Villafranqueza, calle Pelayo y adyacentes. Esta actuación tenía aprobado un presupuesto de 785.000 euros785.000 euros y las mejoras para las que se solicitan el cambio de actuación cuentan con el mismo presupuesto.
«Tras un detenido análisis de las necesidades urgentes del municipio, así como de las alternativas de financiación de las obras, se ha estimado como más necesaria y oportuna la rehabilitación y mejora integral del pabellón polideportivo municipal de San Vicente», expone la concejal de Urbanismo, Mariló Jordá.
En este proyecto, la Diputación se ocupa de subvencionar la mitad del importe y el municipio asume restante.
«La calle Villafranqueza se urbanizó hace poco y no vimos urgente volver a levantar las calles de nuevo», justifica Jordá, quien señala que la vía mantendrá su peatonalización. A su vez, señala que el pabellón polideportivo «tiene 40 años y no se ha llevado a cabo ningún mantenimiento. El parqué, por ejemplo, tiene 30 años y se hunde; está lleno de remiendos. Y a nivel energético se tiene que adaptar a la normativa». La propuesta de inversión y adecuación incluye la remodelación por completo de la instalación eléctrica; también es necesario un cambio de entramado hidráulico; tienen que colocarse nuevas instalaciones de seguridad y de ventilación; realizar el cambio del suelo y la remodelación de los vestuarios. Sólo el cambio del parqué está valorado en 137.000 euros y las instalaciones hidráulicas, cerca de 90.000 euros.
La petición para cambiar el proyecto se envió ayer y la edil de Urbanismo confía en que se pueda llevar a cabo esta modificación. La subvención entra dentro del Plan Provincial de Obras y Servicios para 2016, lo que supone que el Ayuntamiento no podrá volver a solicitar esta ayuda durante el próximo año.
El objetivo del proyecto de la calle Villafranqueza era reordenar el acceso peatonal a dicha calle con el objetivo de fomentar el comercio. Contemplaba la mejora de la accesibilidad de peatones y ciclistas desde la glorieta de la Dona Lluna.
La concejal de Urbanismo recuerda que el proyecto surgió cuando «se produjo el remanente de Tesorería y el Ayuntamiento tuvo que decidir en poco tiempo a qué se dedicaba y hay cosas que no son urgentes», justifica Jordá, quien añade que al pabellón «acude mucha gente todos los días. Consideramos que esta actuación supone un beneficio social mayor que la actuación en la calle».
