150.000 euros después, regresó la línea continua. La Conselleria de Infraestructuras volvió ayer a prohibir adelantar en el cambio de rasante de la CV-800 que une Sant Joan con Xixona. Y lo hizo siguiendo la recomendación realizada por la Jefatura Provincial de Tráfico, que alertaba la pasada semana en un informe que ya adelantó este medio de la peligrosidad de este tramo por la falta de visibilidad.

Porque a pesar de que las obras han durado varios meses y tenían como objeto rebajar la rasante para que se pudiera adelantar en toda la recta, de un kilómetro de longitud, lo cierto es que ha sido una chapuza. La Conselleria primero aseguró que no había ningún peligro, que la obra estaba terminada y todo estaba bien a pesar de las denuncias de Ayuntamiento, grupos políticos, vecinos y del sentido común. Después reconoció que se tenía que haber rebajado metro y medio pero al final sólo fueron 70 centímetros para no dañar varias casas y un tendido, pero insistía que las mediciones concluían que no había peligro.

Y después, tras tomar cartas Tráfico en el asunto, rectificó y anunció que faltaba una segunda fase que aseguró ya estaba prevista, para subir la cota de otro tramo y que los trabajos ya habían empezado, algo que no ha sido así, ya que lo que se estaba haciendo era arreglar las cunetas para rematar la obra realizada.

El último capítulo de esta esperpéntica historia en la que se ha jugado con las vidas de los usuarios de esta carretera llegó ayer. Los conductores se encontraron con que la línea continua había vuelto, entre un sentimiento de alivio e indignación. Alivio porque así se mejora la seguridad, pero indignación porque se ha tirado el dinero en esa obra, según explicaron ayer varios conductores que han sufrido durante semanas los trabajos y las retenciones y molestias que han ocasionado.

Informe

Fuentes de la Conselleria explicaron ayer que la medida de pintar línea continúa se ha debido a que han recibido el informe de Tráfico en el que se alerta de la falta de visibilidad, por lo que hasta que no esté realizada la otra fase se mantendrá la prohibición de adelantar en el cambio de rasante. Pero en cuanto a esa segunda fase, señalaron que aún no puede ponerse en marcha porque se está tramitando, ya que requiere de un ocupación temporal de terrenos que no se había solicitado aún, y que evidencia la imprevisión de la Conselleria en este tema, en el que ha ido rectificando sobre la marcha.

La portavoz del equipo de gobierno de Xixona, Isabel López, manifestó ayer que «la Generalitat no lo ha podido haber hecho peor en este tema. El Ayuntamiento ha venido reclamando acceder al proyecto, al precio que ha costado y lo que se ha hecho al final, desde que vimos como se quedaba, pero no nos han dado nada a pesar de la supuesta ley de transparencia. Desde luego no se ha hecho lo que anunciaron. No han quitado el cambio de rasante y después de meses de obras y dinero malgastado, todo sigue igual, a dos semanas de las elecciones. Esto no tiene ni pies ni cabeza. Han tirado el dinero. Así hace la cosas la Generalitat, que se olvida de trabajar y gobernar y allí están más pendientes de arreglarse lo suyo antes de las elecciones. Es un descontrol total».

López también advirtió que «esto no se va a quedar así. Vamos a ver qué piensan hacer porque se tiene que arreglar. Tienen que hacer lo que haga falta para que se pueda adelantar en ese tramo. Y tienen que dar explicaciones de qué ha pasado y depurar responsabilidades por esta chapuza».