El ambiente preelectoral y la relación contractual del Ayuntamiento de San Vicente con una de las empresas implicadas en la Operación Púnica convirtieron el pleno de ayer en la sesión más tensa y densa de los últimos años. El hecho de que el debate concluyera a las 17.45 horas -había empezado las 13 h.- con los miembros de la Corporación todavía sin comer debió contribuir a enardecer los ánimos en el duro enfrentamiento que la portavoz de Esquerra Unida, Mariló Jordá, mantuvo con el concejal de Informática y secretario provincial del PP, José Juan Zaplana, al final del pleno. Además, socialistas y EU rivalizaron continuamente lanzándose recriminaciones sobre quién había presentado antes tal o cual propuesta ante la mirada socarrona de los miembros del grupo popular y la atención presta de los representantes de Podemos y Ciudadanos, sin representación municipal pero presentes entre el público. Tampoco animaron en absoluto las «clases» de Economía que pareció querer dar el concejal de Hacienda, con sus largas intervenciones. Una de ellas llegó a superar los 15 minutos.
Los puntos más importantes del pleno de ayer eran la aprobación de los impuestos y tasas para el próximo año. La oposición también presentó una decena de mociones, que el PP fue rechazando gracias a su mayoría absoluta y fue en el punto final de ruegos y preguntas donde se abordó el tema más polémico, la operación Púnica, que previamente se había comentado en Junta de Portavoces. Allí Zaplana estuvo explicando a la oposición los pormenores de los contratos con la mercantil Eico.
«Subida del IBI consolidada»
Fue en el debate sobre el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), que se congela para el próximo año, cuando salió a relucir por primera vez este contrato. La portavoz de EU, Mariló Jordá, afirmó que «se nota muchísimo que vienen elecciones y debe haber un manual de uso que dice que a principios de legislatura se suben impuestos y luego se bajan». Tanto Jordá como el portavoz socialista, Rufino Selva, recordaron que en 2012 se aplicó una subida del 10% en el IBI que en principio iba a ser temporal pero se ha consolidado y consideraron que la rebaja en este impuesto para los vehículos eléctricos tendrá escasa repercusión. «Ustedes no hacen buen uso de los impuestos -dijo Jordá dirigiéndose al equipo de gobierno del PP-. Por ejemplo, el Ayuntamiento pagó 26.000 euros a Eico porque hubo un pique entre el PP y otro partido. Eso no es gastar bien el dinero de los contribuyentes».
Jordá se refería así a que el Ayuntamiento contrató a esta empresa para que hiciera las gestiones necesarias para eliminar una página de Facebook que se llamaba Ayuntamiento de San Vicente y logró tener más de cinco mil seguidores pese a que el Consistorio no tenía que ver. La edil dejaba entrever que otro partido estaba detrás de la web falsa.
El portavoz socialista afirmó no darse por aludido para «no entrar en este tipo de provocaciones y reprochó al PP que su eslogan electoral fuera «rebajar impuestos y crear más empleo, cuando han hecho lo contrario».
Por su parte, el concejal de Hacienda, Manuel Marco, contestó que, si se rebajara el impuesto como pide la oposición, el Ayuntamiento ingresaría un millón menos y se preguntó de donde se recortaría este dinero.
La operación Púnica se trató de lleno cuando en el turno de preguntas Selva se mostró sorprendido por que la alcaldesa hubiera afirmado que no sabía por qué se había acabado contratando a esa empresa. Pastor replicó que en el caso de los contratos menores como éste «el concejal del área decide a quién se contrata y tengo confianza en todos mis concejales». La primera edil destacó que «aquí no se ha cometido ninguna falta» pero agregó que «lamenta» haber contratado con esta mercantil y que desconoce «por qué se ha elegido» a esta firma.
Selva replicó que «la única casualidad es que esta empresa formaliza este tipo de contratos y todos con gobiernos del PP», algo que rechazó Pastor, apuntando que también había «alguno» del PSOE.
Jordá consideró el contrato «éticamente reprobable» pues «se está empleando dinero público para que las empresas amigas del PP tengan 'vidilla'». Zaplana respondió que «el Ayuntamiento no tiene nada que ver con el caso de corrupción» y «si la empresa comete irregularidades en otros sitios, yo lo condeno». «A cualquiera que haya metido la mano en la caja, que le corten la mano», sentenció el edil. Pastor tuvo que poner «paz» cuando Jordá acusó a Zaplana de «corrupto» y éste la tachó a ella «cobarde» y «fascista».
Otros asuntos
Entre otros asuntos tratados en el pleno, el concejal Marco anunció que las facturas que el Ayuntamiento ha devuelto a la planta de Piedra Negra suman 380.892 euros y el PP rechazó la moción de EU y el PSOE para contratar un ecopunto. Los dos grupos de oposición se lanzaron reproches sobre asuntos como quién había pedido más mejoras para la reforma de la ordenanza de terrazas de los bares y cafeterías; quién ha defendido mejor a los vecinos tras el recorte de reparto de Correos; o cómo conseguir al transparencia de la Administración.
