El pequeño municipio de La Torre de les Maçanes tiene el privilegio de contar, disfrutar y cuidar del ritual más antiguo que se conserva en la provincia. El rito del Pa Beneit, en el que ayer se volcaron los torruanos coincidiendo con la festividad de Sant Gregori, constituye una de las pocas manifestaciones que quedan en España de los rituales medievales de ofrendas de panes místicos, aunque su origen es pagano y se remonta a la Grecia Antigua. Mañana se repetirá para cerrar los festejos patronales.

Veinticuatro «clavariesses» -doncellas del municipio- desfilaron ayer ataviadas con los trajes típicos con un pan quemado de unos cinco kilos en la cabeza, al que hay que sumar el plato, el ramo y otros ornamentos de este emblemático y singular acto, que ha llegado hasta nuestros tiempos cristianizado por la intervención salvadora de Sant Gregori, que en 1658 libró a La Torre de una plaga de langostas, según la tradición. Cada mujer iba acompañada de un «llumener» -un pretendiente o familiar-, para llevar el pan místico hasta la Iglesia de Santa Ana, donde tras una misa cantada que fue presidida por el obispo de la Diócesis de Orihuela-Alicante, Jesús Murgui, se bendijeron y repartieron entre los varios centenares de asistentes para, según cuenta esta ancestral creencia, invocar la fertilidad y prevenir enfermedades.

El Pa Beneit representa la supervivencia de una ofrenda pagana, con el paso del tiempo cristianizada y ofrendada en honor a Sant Gregori. Constituye aún, además de lo que propiamente conforma o lleva consigo su simbolismo o tradición religiosa, un majestuoso ritual donde la principal protagonista es la mujer en el momento de su iniciación o consideración como tal. Es su presentación en sociedad.

Murgui, en su primera asistencia a este rito, destacó el esfuerzo que realizan estas mujeres para llevar siete kilos en la cabeza y subir hasta la iglesia. Ya por la tarde estaba previsto que se celebrara la Ofrenda Floral a Sant Gregori. Para hoy los actos centrales son una paella popular, juegos y batucada. Mañana llegará el cierre de las fiestas con la repetición del Pa Beneit (11.00 horas), que contará con más «clavariesses», entre 35 y 40, y la procesión por la tarde.

Del mismo modo ayer la Conselleria de Cultura anunció que ha iniciado el proceso de declaración de Bien de Interés Cultural Inmaterial de este ritual. Fuentes de este organismo destacaron que el Pa Beneit «es unas las más raras y escasa muestras de pervivencia en nuestras tierras de una antiguo ritual agrario que, hundiendo sus raíces en época prehistórica, ha llegado a nuestros días cristianizado».

Dentro de las fiestas de panes místicos en España, el ritual de La Torre tiene un lugar destacado, siendo la más antigua tradición que atesora la provincia de Alicante y una de las pocas manifestaciones que quedan en el país de aquellos rituales medievales de ofrendas de panes. Un tesoro único que los torruanos cuidan con mimo desde hace siglos.